El chef José Andrés habla alto y claro sobre lo que verdaderamente se necesita en Valencia: «A veces lo mejor es...»
La DANA que azotó el pasado martes diferentes puntos de la Comunidad Valenciana arroja ya la cifra de 217 fallecidos y decenas de desaparecidos. La que sin ninguna duda es la catástrofe natural del siglo en España ha despertado también una enorme ola de solidaridad, con miles de españoles organizándose para aportar a la causa. También cientos de personalidades de todos los ámbitos han acudido a la zona cero para ayudar en las tareas de reparto y de limpieza. Uno de los que más se ha volcado en las labores es el conocido Chef José Andrés , que a través de su ONG World Central Kitchen repartió este sábado numerosas raciones de comida caliente en la localidad valenciana Chiva. Precisamente este lunes, respondiendo a un usuario de X (antes Twitter) que alababa su gestión con el reparto víveres, José Andrés ha dado su opinión sobre lo que verdaderamente se necesita en Valencia según la experiencia que ha vivido durante los últimos días en la calle. «Ahora hay exceso de ropa por las calles, muchas veces tirada en la cuneta y sucia de barro y ahora mojada después de las lluvias. Comida ahora mismo la gente tiene… hay casos puntuales pero comida hay…», comenta en su tweet el chef, para quien lo más urgente no es la comida ni la ropa, sino herramientas para la limpieza y el rescate de bienes personales. «Palas, capazos, botas de agua… se necesitan, pero hay que saber a dónde llevarlas para ser distribuidas. Mantas… en general los pueblos tienen en ayuntamientos y demás lugares con todo tipo de enseres», subraya, indicando que, aunque la ayuda es bienvenida, su entrega debe ser bien organizada para evitar problemas logísticos. Además, José Andrés hace incapié en que la limpieza de barro es prioritaria y llevará días. El agua estancada es otro gran obstáculo en la recuperación de los bienes de las familias. «Lo más importante ahora es limpieza del barro que va a tomar muchos días… y sobre todo garajes… miles de garajes… bombas de agua también», señala, llamando a centrar los esfuerzos en estas áreas antes de seguir con otras donaciones menos urgentes. El chef también sugiere que, en lugar de enviar donativos materiales, los ciudadanos podrían optar por donaciones económicas, permitiendo que los afectados adquieran lo que realmente necesitan. «La gente no quiere nuestra limosna, quieren su dignidad… y eso se consigue si escuchamos lo que nos piden», concluye.