Policías en México obligan a dos presuntos delincuentes a golpearse y besarse
Un video que circula en redes sociales muestra a policías de Guanajuato golpeando y humillando a dos jóvenes detenidos por presunto robo. La situación ha generado indignación y cuestionamientos sobre la conducta de las autoridades.
En las imágenes, se observa a varios uniformados, entre ellos Christian Eduardo Morales Palomino, actual comandante de la Región IV de Seguridad Pública de Guanajuato, agrediendo físicamente a los detenidos. La grabación ha reavivado el debate sobre el uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades en el estado.
La presidenta municipal de Apaseo el Alto, Monserrat Mendoza Cano, ha solicitado una investigación sobre el caso, enfatizando que el video es antiguo y que se debe esclarecer la situación. Sin embargo, la falta de respuesta de las autoridades estatales ha dejado a la ciudadanía en la incertidumbre.
Detalles del video y la agresión de los policías en México
En el video, se puede ver a Morales Palomino abofeteando a uno de los jóvenes, mientras otro oficial golpea al segundo. Las risas y comentarios de los demás policías evidencian un ambiente de burla y desprecio hacia las víctimas. Una mujer, aparentemente la que graba, se escucha diciendo que los jóvenes “se quitaron” para evitar los golpes.
La situación se torna aún más violenta cuando los policías obligan a los detenidos a pelear entre sí, bajo la amenaza de ser golpeados. A pesar de sus intentos de defenderse, ambos jóvenes terminan en el suelo, siendo pateados por al menos seis oficiales junto a una patrulla sin número de identificación.
Reacciones y consecuencias
El video, que parece haber sido grabado en 2020, ha suscitado una ola de críticas hacia la Secretaría de Seguridad Pública de Guanajuato. La presidenta municipal, Monserrat Mendoza Cano, ha manifestado su preocupación y ha pedido que se investigue el caso para determinar la veracidad de las acciones y si se ha cometido algún delito.
Aún se espera una respuesta oficial de las autoridades de seguridad estatales, especialmente considerando que uno de los involucrados es un alto mando de la policía. La comunidad exige transparencia y justicia ante este tipo de abusos que manchan la imagen de las fuerzas del orden.