Aznar pide ante Feijóo "defender la libertad" en el "frente bélico"

En 1992, el politólogo Francis Fukuyama publicó 'El fin de la historia', un exitoso ensayo sobre la caída del comunismo, el final de la lucha de clases y entre ideologías y, por tanto, del materialismo histórico marxista. Una guía intelectual para derecha neoliberal que esta semana ha sido jubilada durante la celebración del Campus Faes, donde se ha establecido “el regreso de la historia” y, por tanto, del escenario previo a la caída del Muro de Berlín. A la Guerra Fría.

Así lo ha expuesto este jueves el presidente de la fundación, José María Aznar, durante la clausura de las jornadas anuales que organiza Faes y que han contado con la presencia del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y del líder opositor venezolano exiliado en España, Edmundo González.

Si 'El fin de la historia' prometía un mundo globalizado, gobernado por la democracia liberal y donde solo tuviera lugar el capitalismo, tres décadas después la derecha internacional ya no cree que su triunfo sea no solo un hecho, sino una verdad inmutable. Según la tesis de Aznar, “con la historia ha regresado el testimonio de que lo trágico forma parte de la condición humana. Y eso es algo que solo podemos olvidar pagando un muy alto precio”.

“La libertad no se defiende sola”, ha añadido Aznar. El expresidente del Gobierno que metió a España en la Guerra de Irak una década después de que Fukuyama proclamara el final de la historia, ha dicho que la libertad “hay que defenderla en muchos frentes, materialmente y efectivamente bélicos”.

Aznar ha señalado después a los enemigos de occidente: Rusia, el islamismo y el populismo latinoamericano (aunque solo el de Venezuela). “El imperialismo ruso y el terrorismo islamista representan un desafío directo tanto a los principios como a los intereses europeos y occidentales”, ha asegurado. “Iberoamérica lleva años estancada en un proceso de involución democrática que deteriora la región e irradia influencias alarmantes y bien visibles en nuestro propio país”, ha añadido.

El expresidente ha considerado que “la infección populista está devorando a países hermanos que están presentes en nuestro recuerdo y en nuestra conciencia democrática”. “Hemos hablado de Venezuela porque no estamos dispuestos a medir nuestras palabras ni nuestros silencios cuando se trata de la libertad. Estar en el lado bueno de la historia es estar en el lado de la libertad. Desde aquí reafirmamos nuestro compromiso con la oposición democrática, con el presidente electo de Venezuela, Edmundo González, hoy aquí presente, en la que agradecemos muy sinceramente que nos acompañe”, ha sostenido.

Aznar también se ha dirigido al líder del PP antes de cederle la palabra y lo ha señalado como “la alternativa que España necesita”. Eso sí, con las ideas de Faes. “Alberto Núñez Feijóo sabe que esta fundación está a su disposición para generar ideas útiles que sirvan para presentar una mejor alternativa y una mejor oferta a los españoles”, ha dicho quien ocupara su mismo cargo. Esa “oferta” con argumentario Faes será “la más sólida, la más atractiva, la más abierta, la más segura y la más comprometida con la libertad”.

Feijóo, contra México

El líder del PP ha tomado la palabra tras Aznar y, por primera vez en mucho tiempo, ha felicitado al Gobierno por una decisión, aunque sin mencionar al presidente, Pedro Sánchez.

Feijóo ha aplaudido este jueves la decisión de declinar asistir a la toma de posesión de la presidenta electa de México, Clauda Sheinbaum, quien ha querido dejar fuera de la invitación al rey de España. “Lamento que la diplomacia haya fallado”, ha dicho durante una intervención en la clausura del Campus Faes. “Constatado su fracaso, la reacción ha sido lógica. En mi opinión, no cabía otra opción”, ha zanjado.

Feijóo no ha mencionado al Gobierno ni al presidente en sus palabras sobre México en su pseudofelicitación. Pero sí a la presidenta del país norteamericano, a la que ha puesto deberes. “Creo que la presidenta de México le vendría muy bien leer un libro titulado 'Nada por lo que pedir perdón'. Se lo haré llegar en defensa de nuestro legado, de nuestra dignidad y en defensa de nuestro jefe de Estado”, ha dicho.

El líder del PP sí ha mencionado a Pedro Sánchez para insinuar que el Gobierno podría retirar al embajador en México. “Es triste volver a ver que el señor Sánchez pone el foco en si el Gobierno de otro país le resulta simpático o no para defender nuestras instituciones. Y es inaceptable que para el Gobierno haya más motivos para retirar a un embajador por un comentario en un mitin sobre la mujer del presidente que por la falta de respeto al jefe del Estado”, ha dicho. Luego ha explicado: “Y con esto no pido en ningún caso que se retire al embajador de España en México. Al contrario, lo que pido es que se nombre a un nuevo embajador de España en Argentina”.

Además, Feijóo ha avanzado levemente otro punto del plan de conciliación que el PP está intentando vender en los medios esta semana, con un éxito bastante limitado. Si el líder de la oposición se ha enredado estos días en una reforma de los permisos de paternidad y en su idea de aumentar la jornada laboral diaria para poder trabajar solo cuatro días a la semana, este jueves ha asegurado que plantearán aumentar la deducción en el IRPF a las madres trabajadoras. Una medida que, ha dicho, instauró Aznar “hace 25 años” y que desde entonces no se ha actualizado en su cuantía: 1.200 euros al año.

Eso sí, Feijóo no ha dicho a cuánto subiría esa deducción ante un auditorio que únicamente ha aplaudido las referencias a Venezuela durante la hora y media que ha durado el evento, que ha contado con la clausura de la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola.