Cuando los resultados no salen como uno quiere es fácil exponer una larga serie de causas sin que nadie se atreva a rebatirlas o, al menos, a debatirlas. Sean o no sean contrastables, eso siempre ocurre. Lo que sí es verdad es que "el Barça no ha hecho los deberes", tal y como admitió el técnico Xavi Hernández en su rueda de prensa previa al último partido de Liga ante el Valencia y que por eso la plantilla azulgrana se debe sentir en la obligación de acabar el curso de la mejor manera posible, que en este caso es ser subcampeón de Liga a fin de asegurar presencia en la próxima Supercopa de España. Mucho se ha especulado sobre las explicaciones que pueden justificar una temporada en blanco en cuanto a títulos. Confirmada su continuidad la próxima temporada en el banquillo culé, Xavi Hernández tiene en un futbolista al que volvió a poner en el escaparate a un aliado inesperado. Una entrevista en L'Equipe y una anécdota personal sobre su llegada a Marsella dieron pie a Pierre Emerick Aubameyang a una defensa implícita del trabajo técnico de Xavi.
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