El desierto de arena blanca más grande del mundo, alberga huellas fósiles y tiene más de 280 millones de años
Este parque es un sitio importante para la investigación científica, no solo en geología y ecología, sino también en estudios ambientales y climáticos. Los datos recolectados aquí pueden ayudar a comprender mejor los efectos del cambio climático en los ecosistemas desérticos y los procesos geológicos a largo plazo.
Esta maravilla natural es el campo de dunas de yeso más extenso del mundo, y su impresionante paisaje lo ha transformado en un destino turístico muy popular en la región. Igualmente valiosa es la fauna y flora que habita en este entorno.
¿Dónde se ubica el desierto de arena blanca más grande del mundo?
El impresionante Parque Nacional White Sands, situado en el estado de Nuevo México, Estados Unidos es el campo de dunas de yeso más grande del mundo.
El Parque Nacional White Sands se encuentra en la cuenca de Tularosa, abarcando una superficie de 712 kilómetros cuadrados. Su origen se remonta a hace 280 millones de años, cuando la zona quedó sumergida bajo las aguas del océano, lo que resultó en la deposición de una capa de yeso en el lecho marino. Según la página web del parque, "este mineral rara vez se encuentra en forma de arena, lo que hace que el campo de dunas sea una maravilla natural única".
A pesar de las duras condiciones de este entorno, una gran variedad de animales ha aprendido a adaptarse y vivir en este espacio. Entre ellos se encuentran conejos del desierto, ratones apaches, polillas blancas y arañas lobo del desierto. En cuanto a la flora, desempeña un papel crucial, ya que las plantas ayudan a controlar los límites del desierto. Es posible encontrar desde especies de cactus y suculentas hasta arbustos y flores silvestres.
El hallazgo de las primeras huellas humanas en América del Norte
Un nuevo estudio confirma que las huellas humanas en White Sands, Nuevo México, datan del Último Máximo Glacial, lo que sitúa a los humanos en Norteamérica miles de años antes de lo que se pensaba anteriormente.
En septiembre de 2021, investigadores del Servicio Geológico de EE.UU. y un equipo internacional de científicos anunciaron que las antiguas huellas humanas descubiertas en el Parque Nacional White Sands tenían entre 21,000 y 23,000 años.
Este hallazgo retrasó miles de años la fecha conocida de la presencia humana en América del Norte e indicó que los primeros habitantes coexistieron con la megafauna durante varios milenios antes del evento de extinción terminal del Pleistoceno.
En un estudio de seguimiento, recientemente publicado en la revista Science, los investigadores emplearon dos nuevos enfoques independientes para fechar las huellas. Ambos métodos confirmaron el mismo rango de edad que la estimación original, respaldando así la conclusión de que las huellas humanas en White Sands tienen entre 21,000 y 23,000 años.