World News

Un país dividido, asustado y enfrentando múltiples crisis

Después de las últimas dos semanas en San José, quedé muy preocupado al ver la situación que atraviesa nuestro país. Veo un país dividido, asustado y afrontando varias crisis al mismo tiempo.

Un sector productivo hincado por un tipo de cambio artificialmente bajo, causado por una política monetaria manipulada por el Ejecutivo. Miles de agricultores, emprendedores y pulseadores están perdiendo su sustento por un sueño de jaguar mal entendido.

Una juventud traicionada por un sistema educativo deficiente y por despliegues en contra de los derechos humanos de aquellos que han sido históricamente discriminados.

Empresarios que temen criticar al gobierno por miedo a represalias contra sus empresas. Con la excusa de defender el erario, se lanzan ataques a líderes como don Franklin Chang, quien ha querido desafiar la ciencia para construir un motor de plasma y mover al mundo hacia una energía limpia y abundante.

No podemos dejar de lado las décadas de abusos de diferentes gobiernos y la necesidad de eliminar privilegios en ciertos sectores y allegados. Esto debe corregirse a como dé lugar y aplaudo a cualquiera que busque ese objetivo. También aplaudo la eficiencia fiscal sin quitar el apoyo a los más necesitados, a la cultura ni a la educación.

Pero ver las formas de las actuales autoridades, las bravuconadas, los ataques antojadizos, la ineficiencia en todo lo que hacen, la ruta fallida del arroz, la delincuencia sin control, el narcotráfico desbordado, la infraestructura colapsada, la protección del medioambiente en segundo plano, largas filas en la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), el puerto de Caldera causando retrasos de semanas a nuestro comercio exterior y, para colmo, un referéndum que pretende desmantelar la Contraloría General de la República quitándole su principio de legalidad, me dejan un muy mal sabor de boca.

El país está cansado. Algunos están felices por el desarrollo en las costas, donde extranjeros invierten millones para “desarrollar” nuestras playas. Pero la inequidad continúa, la pobreza no cede y la prosperidad, la dignidad y la inclusión parecen sueños inalcanzables.

Hago un llamado a los estudiantes para que salgan a exigir una educación pertinente y de calidad. A los agricultores, emprendedores y pulseadores, para que exijan las condiciones de infraestructura, seguridad y facilidad para hacer negocios que les permitan ser competitivos en un mundo globalizado.

A las mujeres, para que se les ofrezca igualdad de oportunidades. A los padres de familia, para que exijan un país que ofrezca posibilidades de desarrollo para sus hijos. A los partidos políticos, que defiendan sus ideales (si es que les quedan) y para que ejerzan una oposición responsable.

Costa Rica debe regresar a ser un país orgulloso de su educación, en donde florezca una clase de ciudadanos emprendedores con libertad para trabajar, producir y ser lo que cada uno quiera llegar a ser.

Un país donde la institucionalidad se respete y donde podamos expresarnos libremente sin miedo a represalias. Un país donde la juventud se sienta orgullosa de sus gobernantes y quiera participar en política. Un país en donde vivan siempre el trabajo y la paz.

El autor es empresario.

¿Desea enviar un artículo de opinión? Estos son los requisitos:

El texto no debe sobrepasar los 4.500 caracteres con espacios, debe estar bien escrito, ser conciso y no contener referencias a marcas o empresas. Además, es necesario adjuntar una copia de la cédula por ambos lados e indicar su profesión u oficio.

El texto debe enviarse al correo foro@nacion.com en un documento de Word u otro formato editable y debe ser exclusivo para La Nación.

Читайте на 123ru.net