Se firma la primera privatización: la gigante proveedora energética única en la región
El Gobierno avanza con las primeras privatizaciones luego de haber prorrogado por 180 días el permiso para convertir a las empresas y sociedades del Estado en Sociedades Anónimas. El caso con avances más concretos es la mendocina IMPSA, dedicada a insumos energéticos, servicios industriales e inteligencia artificial.
Desde el Gobierno confirmaron que hubo una carta de intención de un inversor privado para capitalizar la empresa. El jueves se realizará un acto a las 12.30 con el gobernador mendocino, Alfredo Cornejo, y comenzará un proceso de due diligence previo a la concreción de la oferta. El proceso llevará 30 días y puede presentarse también otro inversor que desee participar. Terminados los 30 días se abre otra etapa de 60 para mejoramiento de la oferta con la idea de que "Nación y la provincia se corran y se garantice el normal funcionamiento de la empresa con capitales privados".
Las acciones de las que podrá hacerse el comprador son las clase c, aquellas en manos de ambos estados. El posible comprador se conocerá una vez realizada la firma de la carta de intención, aunque aún pueden presentarse otros oferentes. Por lo pronto, se sabe que es de origen estadounidense y que su interés está centrado en capitalizar la empresa.
El CEO actual de la compañía designado por el Gobierno de Javier Milei es Horacio Aldo Chighizola, quien se había desempeñado como vicecanciller durante el Gobierno de Fernando de la Rua, presidente del Banco Ciudad y fue secretario de Estrategia y Asuntos Militares en la gestión de Macri hasta marzo de 2019.
El director por Mendoza en la empresa, Julio Totero, había revelado que IMPSA tenía contratos que alcanzaban los u$s 240 millones, además de estar con proyectos nuevos como el hidrógeno verde y la operación de grúas portuarias, en especial en Estados Unidos, abierta a raíz de las tensiones comerciales con China, principales proveedores de ese equipamiento. Estas operaciones consisten en negocios por u$s 60 millones.
La preocupación del Gobierno gira en torno a la demanda de financiamiento de la empresa, que oscila en torno 5 millones de dólares mensuales, además de la deuda que había refinanciado en 2020 por u$s 560 millones, cuyos intereses comenzaría a pagar en 2025 y los capitales a partir de 2028. Deuda que, en gran parte, derivó de "malos negocios" con Venezuela desde 2014.
La empresa
La empresa se caracteriza por producir insumos para distintos eslabones de cadenas energéticas. Así, produce turbinas, generadores y todo tipo de equipamiento para represas hidroeléctricas, el equipamiento pesado para centrales nucleares, produce aerogeneradores para parques eólicos además de participar en los análisis previos de los proyectos, participa de la construcción y operación de parques solares, produjo reactores para destilerías de hidrocarburos. Además, cuenta con una división de inteligencia artificial para simular los procesos biológicos para mejorar las operaciones y también para optimizar la producción en la planta.
IMPSA fue recuperada en 2021 por el Gobierno de Alberto Fernández luego de que solicitara asistencia estatal a raíz de las deudas acumuladas. En su momento, el Estado inyectó $1.362.900.000 y pasó a hacerse cargo de más de la mitad de las acciones.
Al día de hoy, el Estado nacional es titular del 63,7% de las acciones de IMPSA, que están en manos del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP) bajo la órbita de la Secretaría de Industria del Ministerio de Economía. El 21,2% están en manos de la provincia de Mendoza, y el 15,1% pertenece a capitales privados, de los cuales el 9,8% son los acreedores de la compañía y el 5,3% es de un fideicomiso controlado por accionistas originales y fundadores de la empresa.
La empresa exporta el 85% de su producción, cuenta con 750 trabajadores y una cadena de valor de más de 100 pymes que generan casi 1.500 puestos de trabajo. Fundada en 1907, tiene presencia en más de 40 países y participa en la generación de más de 50.000 megavatios en el mundo. Es además una de las cuatro compañías destinadas a la alta tecnología para energía en el mundo. Solo en 2023, IMPSA pagó impuestos por u$s 23 millones.
Si bien tiene amplia participación a través de insumos en Argentina, también tiene actividad en Brasil, Uruguay, Colombia, Ecuador, Perú, Venezuela, Costa Rica, Nicaragua y Guatemala. Fuera de la región, participó en 19 operaciones en Estados Unidos, entre grúas de puertos e hidroeléctricas, dos en África, 21 en Europa, 2 en India y 22 en Asia.