La exconsellera valenciana de Vox deja el partido por su «deriva radical»
Los exconsellers de Vox en el Gobierno valenciano, Vicente Barrera, José Luis Aguirre y Elisa Núñez , han escenificado este martes -visiblemente emocionados- el traspaso de carteras a sus sucesores entre gestos de complicidad por la relación personal forjada entre los socios. Los tres fueron cesados tras oficializarse la ruptura de Vox con el PP -instada desde la dirección nacional del partido- y su salida del Ejecutivo autonómico de coalición por la acogida de menores migrantes. Poco después de terminar esos actos ha trascendido una carta de Nuñez, dirigida a Santiago Abascal, en la que comunica su baja como afiliada de la formación ante la «deriva radical» que está tomando. El detonante, explica la extitular de Justicia e Interior de la Generalitat, ha sido la decisión del Comisión Ejecutiva Nacional de abandonar los gobiernos regionales que compartían con los populares. Una determinación que no comparte, que conoció por los medios de comunicación y ante la que guardó silencio «por lealtad». En el acto celebrado en el Palau de Valeriola después de la toma de posesión de los nuevos consellers, quien fue vicepresidente primero de la Generalitat hasta el jueves Vicente Barrera ha señalado que tanto él como los cargos de la cuota de Vox en el Gobierno regional se han sentido «apoyados, respaldados y comprendidos» por sus compañeros del PP. Así se ha expresado en un último discurso de despedida, tras el que se ha fundido en un abrazo con el presidente autonómico , el popular Carlos Mazón . A él, ha aseverado, le debe «eterna gratitud». Asimismo, ha tenido palabras de agradecimiento hacia Abascal y hacia su equipo en la Conselleria de Cultura y Deportes. «Llegué aquí de imprevisto», ha indicado, «con poco bagaje». «También me voy sin esperarlo» , ha añadido. «Me llevo una gran experiencia. Me he dejado la vida por intentar hacerlo lo mejor posible» en un año «de intenso trabajo», ha sostenido. Barrera ha traspasado su cartera a José Antonio Rovira, que suma las competencias de Cultura a las que ya ostentaba al frente de la Conselleria de Educación, Universidades y Empleo. Las de Deportes las asumirá Presidencia. Precisamente, Carlos Mazón ha alabado «la pasión y convicción» de Barrera, así como la «calidad humana» y «la extraordinaria generosidad» con la que ha trabajado durante este tiempo de «cambio» al frente del departamento autonómico. «Con él he reído, he llorado, he soñado, he diseñado y he debutado en la misión más importante de mi vida». «Jamás podré olvidar el año en el que vivimos peligrosamente. Salimos vivos y más amigos de lo que podríamos imaginar», ha insistido, al tiempo que se ha mostrado convencido de que el exvicepresidente ayudará desde fuera del Gobierno a sacar adelante los proyectos que ha puesto en marcha. Previamente, también en presencia de Mazón, pero en la Ciudad Administrativa del 9 de Octubre, tanto Elisa Núñez como José Luis Aguirre han mostrado mucha sintonía con sus sustitutos al frente de Justicia e Interior -Salomé Pradas- y Agricultura -Miguel Barrachina-, respectivamente. Nuñez, en el foco de la polémica en las últimas semanas por los cambios en los cursos sobre violencia de género para policías , se ha limitado a manifestar durante el acto que deja su cartera en buenas manos. Por su parte, Aguirre ha reconocido que su paso por la Generalitat «ha sido demasiado corto» y que le «hubiera gustado hacer mucho más» en su área porque quedaban «muchos proyectos en marcha». «La estrategia política de los partidos que pactaron ha hecho que quien me encomendó esta ilusionante misión haya decidido que ahora me retire y que no pueda terminar de desarrollar todos estos proyectos o cosechar el fruto de nuestros esfuerzos», ha lamentado.