Cheptegei firma una obra de arte

Joshua Cheptegei tiene fuerzas para saltar, gritar y abrazarse a sus compatriotas ugandeses después de la final de 10.000 metros de París 2024 . Normal. Acaba de fabricar una obra de arte para ganar ese oro con el que tanto había soñado y que tanto se le había resistido al fondista de Kapchorwa. No era fácil asumir que siendo plusmarquista mundial de 5.000 y 10.000, campeón olímpico del 5.000 (Tokio 2020), tricampeón mundial de 10.000 en tres ocasiones y campeón del mundo de cross no hubiera en su cuello una medalla de oro olímpica en la distancia que más le gusta. De hecho, aplazó su paso definitivo al maratón para venir a París a cumplir la tarea pendiente, que ya no lo es tal. Cuentas saldadas para Cheptegei después de una final de 10.000 metros enorme en la que el ugandés dejó en evidencia a Etiopía , la selección que trabajó como un equipo para descubrir el estado de forma del rival que más les asustaba. Kejelcha, Aregawi y Barega forman un trío donde cualquiera de ellos puede ganar, y donde este último defendía la corona olímpica que conquistó en Tokio ante el mismo Cheptegei. Los etíopes tenían clarísimo que debían componer una final rápida, de hecho, se batió el récord olímpico con 26.43.14, así que se pusieron manos a la obra y se fueron animando al ver que Cheptegei marchaba a cola de grupo durante buena parte de la carrera. Pero el ugandés, además de un grandísimo atleta, demostró ser un destacado estratega . Su aparición por la cabeza a cuatro vueltas del final llenó de dudas a sus rivales africanos, y de repente la final cambió. Ya nadie estaba seguro de nada, pero hasta una docena de atletas se veía a falta de dos giros capaz de pelear por las medallas. Claro que faltaba lo mejor, cuando Cheptegei se puso en cabeza para armar un ataque de 400 metros que rompió a sus rivales . Fue hermoso ver al ugandés deslizarse por la pista morada del Stade de France hacia ese oro soñado mientras Aregawi salvaba al final los muebles para una Etiopía que estuvo a punto de quedarse sin premio al trabajo. A sus 27 años Cheptegei presume de un palmarés completo y de ser el mejor fondista de la actualidad . Un talento que se adapta a todas las superficies y del que se espera lo mejor cuando regrese al maratón, después de estrellarse en diciembre en su debut en Valencia. Seguro que el atleta del valle de Kapchorwa habrá tomado nota para el futuro. Allí, a más de 2000 metros de altitud, en un lugar con unas condiciones ideales para entrenar, Cheptegei ha conseguido, además de ser un referente en el atletismo, poner a su país en el panorama atlético hasta ser capaz de derrotar a otras potencias atléticas africanas como Kenia y Etiopía. Poco se sabía de Uganda hasta que el campeón olímpico empezó a acumular triunfos y plusmarcas mundiales. Ahora, los rivales ya saben del atletismo ugandés, solo hay que ver el trabajo sin frutos que realizó anoche Etiopía. Junto a Cheptegei y Aregawi estuvo el estadounidense Fisher, que logró un gran bronce, mientras por parte española, Thierry Ndikumwenayo rindió a muy buen nivel para finalizar noveno con 26.49.49 y acabar con el histórico récord de Fabián Roncero, vigente desde 1998. La primera jornada de atletismo ofreció a los aficionados que casi llenaron el Stade de France el primer récord del mundo. Estados Unidos batió su propio registro en una prueba joven y espectacular como es el relevo mixto 4x400 metros, y lo hizo en las semifinales con 3.07.41. Además de la final del relevo mixto y del triple salto con Ana Peleteiro , la segunda jornada de atletismo deparará dos grandes finales. En la recta del Stade de France estarán las mujeres más rápidas del planeta, en una final de 100 metros donde Sha'Carry Richardson buscará el oro olímpico tras el título mundial que logró el pasado año. Una victoria de la jamaicana Selly-Ann Fraser Pryce, mientras tanto, supondría la despedida perfecta de una de las grandes damas del atletismo mundial. Y en el lanzamiento de peso, otra estrella como Ryan Crowser en su empeño por seguir acumulando títulos y grandes marcas en una especialidad a la que ha dado un gran protagonismo en los estadios. Sifan Hassan ya ha elegido reto para estos Juegos y ayer empezó su tarea de pluriempleada en el atletismo de París. Estaba apuntada a cuatro distancias y durante mucho tiempo apuntó a ello, pero finalmente lo hará en tres para emular a una de las grandes leyendas del atletismo, Emil Zatopek. La neerlandesa correrá los 5.000 y 10.000 metros en pista y el último día estará en la salida del maratón olímpico, lo mismo que hizo la 'locomotora checa' en los Juegos de 1952.