World News

 ¿Intervención quirúrgica?

Ahora toca definir en el caso de Venezuela, de forma rápida y definitiva, lo que aconseja aquel dicho que reza “más vale tarde que nunca” frente al cáncer que amenaza con hacer metástasis continental. Ante la intervención descarada y abierta del eje del mal Moscú-La Habana en Latinoamérica, y con el oportunista cálculo chino en su creciente rol de aprovechado interlocutor mundial frente a los Estados Unidos de América, ¿no será precisamente momento para una intervención quirúrgica en América? ¿No es momento de iniciar ya una estrategia de cooperación internacional dentro de los países de este continente?

La interferencia de los mencionados actores Rusia-Cuba, y de la China con determinante incidencia en la alineación al reconocimiento a la genocida dictadura narcocriminal del títere Maduro, ha corroborado nuevamente, y por si hacía falta alguna otra evidencia, que nada les importa respetar resultados de la decisión democrática de los pueblos, y sus elecciones. Esos son nuestros valores y conceptos de libertad y democracia occidentales, para nada los de ellos. De allí que Occidente eleve su legítima defensa y suba las recompensas a la captura de los criminales del régimen es plausible. En breve la Cátedra Internacional por la Libertad “Francisco de Miranda” impulsará la iniciativa.

A los mencionados aliados dictatoriales que ahora reconocen a Maduro, en medio del burdo intento de pasar resultados fraudulentos, antes igualmente no les importó el fraude electoral perpetrado por la dupla dictatorial Ortega-Murillo en Nicaragua en 2021. Ni la represión con detención de candidatos de la oposición y exilio. El pequeño país centroamericano, con una población según censo de 2023 de un poco más de 6,8 millones de habitantes, tiene una ubicación geopolítica importante para la región. Este precedente se repite ahora agravado en Venezuela de 28 millones de ciudadanos que quedan, con las características específicas de la  nación suramericana y caribeña petrolera, con las más grandes reservas improductivas, además de un conflicto territorial con Guyana auspiciado por las empresas que lo buscan, como es su costumbre de pescar en río revuelto.

Respaldando el anuncio de un “amoroso resultado de servilleta electoral” que, de no ser por la tragedia que conlleva al pueblo venezolano el intento del grosero fraude, sería motivo de chistosa paradoja verbal el nacimiento en adelante del término de descripción de “fraudes electorales bananeros” como del tipo  “resultado amoroso”.

Obstruyendo una salida negociada, a nivel de los actores internos entre el régimen y la oposición, para el fin de la dictadura e inicio de la transición democrática, dicha interferencia en la situación ha llegado a secuestrar definitivamente la soberanía de Venezuela.

Invadida la patria de Miranda y Bolívar desde dentro, por millares de cubanos-castristas, y cedida desde tiempos del chavismo a dicha intervención con respaldo y aprovechamiento de una potencia de cuidado como China y de sus peligrosos socios para el continente como Irán, es tiempo de pasar de la contemplación del agravamiento del entorno continental a implementar más audaces e inteligentes operaciones quirúrgicas.

Estamos ante más que un equivocado Vladimir Padrino López, un traidor a la patria. Se llegó a pensar por un instante que le quedaba una salida honrosa, con algo de coraje, inteligencia y apego a la soberanía del pueblo venezolano, para zafarse así de la sujeción que ejerce sobre él Putin. Su dignidad patriótica como profesional militar venezolano la ha vendido al diablo de la mafia rusa; y todo indica que no cederá a propuestas de colocarse del lado correcto de la historia, que sería ceñirse a la voluntad del pueblo venezolano y aceptar la protección de los Estados Unidos, para viajar él y su familia, y dejando en manos de una “comisión militar delegada”  el país para que se asuma el control del orden democrático interno de una casa militar bajo instrucciones del presidente electo e inicio de las coordinaciones con el equipo liderado por la ingeniero Maria Corina Machado.

De no darse inmediata señal de rectificación, no habrá alternativa sino concluir que se va a requerir una vital intervención quirúrgica, lo que se ha estado evitando y postergando desde hace ya demasiado tiempo. De naturaleza de castigo a delitos de lesa humanidad cometido por Maduro y su tren de narcodelincuentes, así como la entrada en escena de una agencia DEA, la cual fue precisamente echada de Venezuela desde tiempos del galáctico Chávez; ahora descabezado en sus estatuas por el país de a pie.

En detrimento del agravamiento de la problemática, no sólo para la nación venezolana, sino de las naciones del entorno por una incontrolada migración, e incluso en los últimos tres años hacia Estados Unidos, donde se ha registrado cerca del medio millón de venezolanos, que sumados a lo antes existentes rondan el millón de inmigrantes. En total se ha estimado en más de 8 millones de ciudadanos, algo cercano a la cuarta parte de su población que ha salido de Venezuela, y sólo una solución interna garantiza que si bien no todos se regresarán, lo hará un porcentaje significativo de imposibilidad de predecir, pero lo que sí será sin duda muy importante es que detendrá la continuación de una migración desesperada de impacto muy desestabilizador en lo social, económico y político para cualquier país, por el torrente de inviable manejo ordenado y progresivo  para la debida integración al país de destino.

catedrainternacionallibertad@gmail.com /@gonzalezdelcas

La entrada  ¿Intervención quirúrgica? se publicó primero en EL NACIONAL.

Читайте на 123ru.net