Perú: Una democracia que tolera la transgresión
En una sociedad desformal como la peruana, donde existe una enorme tolerancia y autojustificación a las transgresiones, permite que los actores políticos, como congresistas, no se sientan obligados, al punto que expresan su interés particular en nombre del interés general. Así lo precisó el sociólogo chileno Danilo Martuccelli durante su exposición sobre “La democracia en sociedades desformales” en el seminario internacional organizado por el Instituto de Estudios Peruanos (IEP).
Indicó que esta falta de contención de conductas es uno de los grandes problemas de sociedades desformales.
“Existe un fenómeno central, transversal, estructural en el Perú que se puede caracterizar como un fenómeno masivo de desformalización, donde las instituciones, leyes, narrativas, ideologías contienen difícilmente a actores individuales y colectivos”, dijo.
Mencionó que la informalidad económica, el desborde popular, los achichamientos culturales, las implosiones políticas cada vez son cuestiones distintas que ponen en jaque a leyes, narrativas o ideologías.
Refirió que lo que pasa en el Perú tiene similitud con lo que ocurre en otros países de la región, pero dada la intensidad, la extensión y la confluencia de los fenómenos de desformalización, es más específica en nuestro país. Recomendó “tratar de analizarlas sin ningún narcisismo nacionalista”.
Modus vivendi
Martuccelli expuso que en las sociedades desformales es casi una regla que las cosas buenas o malas se den de manera torcida, lo que se ha convertido en un modus vivendi en nuestra sociedad.
“La importancia de la apariencia se ha agrietado y la desfachatez aparece más clara en espacios públicos”, anotó.
Asimismo, el sociólogo chileno consideró que no hay élites, por tanto, ese discurso del pueblo contra las élites tiene poca función en el país.
“No sé cómo se puede rehabilitar lo elitario en la sociedad desformal peruana, porque la derecha solo sueña en restaurar privilegios que no van a regresar, y la izquierda solo piensa en cuestionar desigualdades que muchas van a permanecer”, señaló