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La contaminación de Glefaran generó riesgo de cardiopatías o cáncer en Güeñes y Zalla, según un informe de la Fiscalía

El ministerio fiscal entrega un contundente informe al juzgado de Balmaseda que investiga a un representante de la compañía y cuatro excargos de Medio Ambiente del Gobierno vasco, dos del PNV y dos del PSE-EE

Archivada la causa contra el exalcalde de Güeñes y dos excargos de Medio Ambiente por las emisiones de Glefaran

Glefaran era una compañía que estuvo ubicada entre Güeñes y Zalla, en las Encartaciones vizcaínas. Cerró en 2023 tras seis años operativa. En un inicio, llegó a llenar las calles de cenizas negras y generó una gran contestación social. Ahora, un informe oficial constata que “las superaciones en las emisiones de partículas por parte de Glefaran serían susceptibles de generar un riesgo de daño grave sobre la salud humana y el medio ambiente”, incluido un descenso de las precipitaciones. En el caso concreto de los efectos para los vecinos, el documento recoge el “riesgo de desarrollar cardiopatías, neumopatías [o] cáncer de pulmón, entre otros efectos adversos sobre la salud, incluso en concentraciones bajas y a corto plazo”.

La 'número dos' de la Fiscalía de Medio Ambiente del Tribunal Supremo, María Cristina Zurdo, ha terciado con este contundente informe de conclusiones en la investigación penal abierta en un juzgado de Balmaseda, en Bizkaia, por las denuncias recibidas por Glefaran . El documento, fechado a 30 de agosto y notificado unos días después, el 5 de septiembre, señala también que el Gobierno vasco, como autoridad competente en el control de estas actividades, no actuó en todo momento contra las irregularidades cometidas. La Fiscalía sostiene que Glefaran llegó a superar entre “cuatro y cinco veces” los máximos aceptables de emisiones, particularmente en 2018. Y remarca que, en algunos momentos, “no se tiene constancia de expediente sancionador” cuando eso se detectó.

La magistrada de Balmaseda encargada del caso, María Inmaculada Samaniego, tiene que decidir ahora si da por concluida la investigación y ordena la apertura de un juicio. Está imputado el empresario José Luis Orue como responsable de Glefaran pero también cuatro excargos de Medio Ambiente del Gobierno vasco, dos del PNV y dos del PSE-EE, que gestionó esta cartera de 2016 a 2020. Los nacionalistas son Iosu Madariaga y Alejandra Iturrioz, viceconsejero y director, respectivamente, cuando la consejera del ramo era Ana Oregi. Los socialistas son Elena Moreno e Iván Pedreira, con los mismos cargos durante la etapa de Iñaki Arriola. Moreno sigue en el Ejecutivo como directora de Turismo y, según el criterio de la Comisión de Ética, tendría que dimitir si fuese procesada por este sumario. Pedreira es alto cargo en la Diputación de Gipuzkoa.

Hace unos años se abrió otra causa por denuncias relacionadas con Glefaran. La magistrada de Balmaseda Nerea del Río Amieiro, por el contrario, acordó el sobreseimiento “provisional” de la investigación penal contra el exalcalde de Güeñes por el PNV, Imanol Zuluaga, asesor con Gotzone Sagardui y aún ahora con Alberto Martínez en Salud, y de nuevo contra Moreno y Pedreira. Se analizaba una denuncia de la plataforma contra la contaminación en Glefaran Güeñes Bizia sostuvo que nunca se realizaron mediciones sobre “benzopirenos” y otros metales pesados, por lo que fueron a los tribunales acusando a Medio Ambiente de falsear las conclusiones que negaban la toxicidad de la actividad de la empresa. Esta plataforma ciudadana ha llegado a crear una obra de teatro -“Güeñeovejuna”- para denunciar la situación de la zona, entre otras movilizaciones.

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