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Una telespectadora de 76 años se confiesa ante Ana Rosa Quintana: «¡Soy adicta a los juguetes sexuales!»

Abc.es 
El consumo de juguetes sexuales ha crecido en España un 135% y «en gran medida se debe a que cada vez más personas mayores están descubriendo estos aparatos y comienzan a utilizarlos». Así lo han señalado en ' TardeAR ', donde la mismísima Ana Rosa Quintana ha dicho que ahora le salen anuncios publicitarios de artilugios para uso erótico, «desde que empecé a buscar en Google para prepararme el tema», ha querido aclarar. Si ella dice haber utilizado el buscador para documentarse, Antonia Buendía se deja de excusas y, a sus 76 años, se confiesa «adicta a los juguetes sexuales». Comenzó a saber de ellos en la peluquería, donde «las jóvenes que acudían hablaban del tema. Ya ves, ¡yo ni idea! Les fui preguntando y un día me fui a Cartagena a comprar uno, a un sex shop, y me traje dos en promoción». Se quedó viuda hace dos años pero le dio tiempo a utilizarlos con su marido. Ha relatado una anécdota que ha despertado las risas del público y de la mesa de debate: «y es que un día que estábamos al lío mi marido de repente paró por un ruido extraño. Me preguntó si sería el frigorífico y ya ves, era el juguete». Tanto Frank Blanco como Boris Izaguirre han interrogado a Antonia: «¿Cuántas veces lo utilizas?»; «¿lo llevas de viaje?»; «¿qué te aporta respecto a una relación con un hombre?». Buendía estaba encantada en el salón de su casa con esta conexión en directo y no ha tenido pelos en la lengua al responder. Ha dicho que lo mejor es que nunca falla, que siempre procura tenerlo cargado para que no le falle aunque en alguna ocasión «me ha dejado a medias y no me ha hecho ninguna gracia». Los momentos en los que recurre a estos aparatos suelen ser cuando «estoy algo triste y siempre me anima, tanto que se me quedan los ojos en blanco, vaya, y los pies colgando de la cama. ¡Una maravilla!», ha comentado con una gran sonrisa a Ana Rosa Quintana . Y es que en sus años mozos, como ella misma ha relatado, era todo «aquí te pillo, aquí te mato. Imagina, con 10 hijos que he tenido, pues poco de placer y mucho de oficio y trabajo». Probablemente muchas mujeres como Antonia lo estén utilizando aunque lo mantengan en secreto e igual otras no se animan por los tabúes existentes al respecto. Esta mujer ha demostrado a la audiencia de ' TardeAR ' eso de que 'nunca es tarde si la dicha es buena'.

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