Carrefour se disculpa por cuestionar la carne de Mercosur tras sufrir un boicot en Brasil
Carrefour ha tardado muy poco en pedir disculpas tras advertir la semana pasada del riesgo de desbordamiento en el mercado francés «de una producción de carne que no cumple con sus requisitos y estándares «, dijo el director ejecutivo de la empresa, Alexandre Bompard, en una misiva en la que también aseguraba que no venderían carne importada de ningún país del Mercosur . Con esta carta, que también compartió en sus redes sociales, el directivo pretendía ponerse del lado de los agricultores en un país que mayoritariamente simpatiza con la causa 'anti-Mercosur'. Sin embargo, al hacerlo no midió bien sus palabras ni calculó los daños potenciales en Brasil, país en el que Carrefour es líder en ventas. La situación tardó poco en escalar. El gobernador del estado agrícola de Mato Grosso llamó a boicotear las tiendas Carrefour a nivel nacional y la prensa hizo el resto. El viernes de la semana pasada la compañía brasileña JBS, que es la primera cárnica del mundo, suspendió los envíos a la empresa francesa y poco después las agroalimentarias Marfrig y Masterboi hicieron lo mismo. Ayer, cuando el desabastecimiento en algunas tiendas ya era muy real -según informó EFE- y con el ministro de Agricultura de Brasil asegurando al canal GloboNews que estaba «feliz con la actitud» de los proveedores, finalmente Bompard tuvo que volver sobre sus pasos para evitar daños mayores. «Si la comunicación de Carrefour Francia generó confusión y pudo ser interpretada como un cuestionamiento de nuestra asociación con la agricultura brasileña y una crítica a la misma, pedimos disculpas», escribió Bompard en una carta dirigida al ministro brasileño de Agricultura, Carlos Favaro, obtenida por la AFP. En la misiva el directivo alaba la carne brasileña, que califica como de «alta calidad y sabrosa» y que «respeta las normas». No aclara si mantendrán el boicot o no, pero lo cierto es que la polémica se centró en que Bompard cuestionara la calidad de la producción brasileña, más que en el hecho de que anunciara un boicot en Francia, país en el que las importaciones de carne de Brasil son residuales. Pedidas las disculpas, los ministerios de Relaciones Exteriores y Agricultura de Brasil han publicado una nota conciliadora, pero que incluye un aviso a navegantes: «El gobierno brasileño espera que las empresas que anunciaron boicots a productos brasileños reviertan esas decisiones infundadas y que todos los actores que hayan contribuido a esa campaña de desinformación tengan presentes las consecuencias negativas de sus actos y consideren el grave impacto que podrán tener para sus relaciones con Brasil». Por su parte, e l Gobierno prometió volver a «reaccionar con firmeza contra cualquier nueva campaña que tenga como objetivo la imagen de productos brasileños».