Y Jorge Martín llegó a El Hormiguero...
Este miércoles, el campeón del mundo de MotoGP llegó por fin a ‘El Hormiguero’ después de un proceso largo, cansino, traumático y, sobre todo, muy absurdo. Pablo Motos dejó de insistir en el conflicto que mantiene con ‘La Revuelta’ y la rivalidad por los invitados. El presentador recibió a Jorge Martín como si nunca hubiese pasado nada. Eso sí, cuando lo tuvo en la mesa le lanzó una indirecta: “Últimamente estás muy solicitado…”. La entrevista, como es habitual, fue previsible y evolucionó según los tópicos que ha construido el propio Hormiguero. El sueño del título, la experimentación de la alegría una vez llegas a la cumbre, los detalles más prosaicos de la celebración, las supersticiones y los sacrificios del oficio. Da igual si eres piloto, futbolista o gimnasta. Motos, de siempre, ha demostrado cierta obsesión por profundizar en el éxito de sus invitados, como si quisiera descubrir la fórmula secreta que hay detrás para seguir alimentándose de ella. Pero durante la entrevista se produjo un breve diálogo muy sintomático, casi como un fantasma que aparece sin que los protagonistas se den cuenta. Motos le preguntó a Jorge Martín por su máximo rival, Pecco Bagnaia. El piloto contó que cuando eran unos chavales fueron amigos y que ahora, a pesar de la profunda rivalidad que existe entre ellos, mantienen una relación cordial. Martín explicó que habían charlado un rato después de su triunfo. “Es muy difícil mantener una amistad en primer nivel porque es o él o tú” le comentó Motos. El piloto insistió en el intento de ambos de mantener un trato amable y el presentador reiteró su sorpresa: “Es algo único. Es muy especial realmente que puedas estar con un rival y que no tengas esa furia del o tú o yo”.