Herramientas desde Córdoba para que el pistacho sea más rentable
A los cultivos tradicionales en Córdoba se le han ido añadiendo nuevos que hasta ahora eran desconocidos aquí, pero que actualmente están desarrollando una fuerte implantación en la provincia dada su mayor rentabilidad. Es el caso del pistacho , que se introdujo inicialmente en el Norte, pero está empezando a estar presente en la campiña. Fruto de ese crecimiento nació a finales de 2022 el grupo operativo DRIS Pistacho, formado por las firmas Secran y Signlab, ambas ubicadas en el Parque Científico Tecnológico Rabanales 21 , junto con Eurosemillas y el Centro de Investigación Agroalimentaria (Cicap), con sede en Pozoblanco. Su objetivo, mejorar la rentabilidad de las explotaciones que trabajan con este fruto seco. El proyecto se desarrolla a través de una plataforma web y una aplicación móvil. El CEO de Secran, Antonio Serrano , explicó a ABC que «los agricultores pueden tener un seguimiento completo y continuo de su finca» durante el periodo previo a la entrada en producción del cultivo, realizando un análisis del cultivo u optimizando el uso de los abonos a fin de que el crecimiento de la planta sea el adecuado y reduciendo su impacto ambiental. Una vez que el pistacho se puede recoger, esta herramienta permite realizar estimaciones de cosecha, comunicar alertas de heladas, aportar información pluviométrica o dar recomendaciones a los productores a fin de mejorar la rentabilidad de sus plantaciones . «Para el año que viene queremos introducir una novedad, que es la emisión de informes periódicos cada dos meses para dar a conocer al productor cómo se desarrolla el cultivo y darles advertencias sobre todo tipo de cuestiones», anunció el directivo. La obtención de todos estos datos se consigue a través de tecnologías como la teledetección o la inteligencia artificial. La información del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación señala que la superficie de este fruto seco en Córdoba ascendía a finales de 2023 a apenas 131 hectáreas, de las que unas 31 eran de regadío. Son cifras muy alejadas a las 2.800 hectáreas sembradas en Granada y a las 2.200 correspondientes a Málaga. Sin embargo, desde el grupo operativo están convencido de que esta superficie irá incrementándose a corto y medio plazo «gracias a su bajo coste de mantenimiento, su alta resistencia a las condiciones climatológicas adversas y a su excelente rendimiento económico tanto en las cosechas como en el mercado». La semana pasada los precios en origen se situaban por encima de los ocho euros por kilo. Serrano informó de que el pistacho es un cultivo que precisa entre 700 y 1.000 horas de frío durante la campaña de recolección, pero sin que se lleguen a producir heladas. Por este motivo, comenzó su introducción dentro de la provincia de Córdoba en la comarca del Valle de los Pedroches . Estas plantaciones se han ido impulsado con las variedades de semillas clásicas, que tienen el aspecto negativo de que tardan siete años hasta que son productivas, es decir, que se pueden recolectar. Durante ese periodo son necesarias inversiones muy importantes, algo que echaba para atrás a no pocos agricultores a la hora de apostar por este cultivo. Sin embargo, según apuntó el representante de Secran, últimamente han surgido nuevas variedades de simientes que son distribuidas por Eurosemillas que permiten recortar ese tiempo hasta los cuatro años, lo que resulta más atractivo a los productores. «Esta modalidad está funcionando muy bien en la Campiña y ya se está cultivando en la finca de El Cortijo la Reina (ubicada entre Córdoba y Guadalcázar) y Santaella», destacó Serrano, quien aseguró que «los estudio que ya se ha hecho en Estados Unidos con esta variedad están dando muy buenos resultados desde el punto de vista productivo». Los impulsores del proyecto indican que muchos olivareros están apostando por sumar a sus explotaciones la almendra y el pistacho debido a su rentabilidad y a que se utiliza el mismo sistema y la misma maquinaria para la recolección de las aceitunas , lo que también reduce los costes de producción de los agricultores. También tenían claro que querían que sus investigaciones se desarrollasen sobre el terreno. De este modo comenzaron trabajando para una treintena de productores, una cifra que se ha duplicado en la actualidad. La semana pasada presentaron su proyecto en Expo AgriTech , una cita sectorial que tiene lugar en Málaga y en la que «se presentan las tecnologías más avanzadas en agricultura sostenible y de precisión».