La sombra del huésped
Las nuevas disposiciones para la hostelería vienen con polémica. Los hoteles ahora piden más que una firma en el registro, más que un número de pasaporte, de carnet, una dirección que nadie comprueba, una foto que nadie mira. Los hoteles reclaman poco menos que el alma entre los datos, el susurro de lo privado entregado al Ministerio del Interior con esta nueva ley de desprotección de datos que convierte cada huella de nuestros viajes en un Gran Hermano en aras de la lucha contra la delincuencia. El viajero llega con sus maletas llenas de ropa, pero antes de abrirlas en su habitación debe vaciar en recepción su identidad, desnudar sus datos sobre un papel sin que se ofrezca un mínimo... Ver Más