Diez platos resultones y sin florituras para un menú festivo
Desde el aperitivo hasta el postre, con ingredientes sencillos y basándonos en los alimentos de temporada, podemos elaborar una cocina casera y sabrosa para reunirnos y celebrar en torno a la mesa
Tarta de calabaza: una receta asequible y original para sorprender con un postre navideño
Estamos ya a las puertas de las fiestas y se acercan los momentos para compartir, reunirse y también comer, comer y comer. Y he aquí el gran quebradero de cabeza de todas las celebraciones: qué preparamos que guste a todos, que no nos obligue a derrochar ni a estar en la cocina todo el día, y que no nos amargue la digestión.
¿Es posible algo así? Sí, y no hablamos de cocina preparada, que suele ser cara y además estamos decididos a huir de los procesados. Pasemos del famoso capón relleno solo para calentar y comprobemos que podemos celebrar una comida o cena festiva extraordinaria con platos sencillos cocinados en casa.
Para elaborar un menú fácil, no tan caro y más saludable, nada mejor que tirar de memoria familiar y recetario tradicional, y acudir a los platos de siempre que suelen ser de producto de temporada y más baratos. Con la base en recetas de toda la vida y un poco de imaginación podemos diseñar un menú completo y sabroso.
Te proponemos diez platos resultones y sin florituras que pueden servir para cualquier fiesta, desde el aperitivo hasta el postre.
Tarta Tatin de tomate y mozzarella
Si no te has metido a repostero no te preocupes, tampoco lo pretendemos. Esta tarta Tatin de tomates que te puede hacer quedar muy bien en cualquier comida o cena es bastante fácil desde que existen las masas preparadas.
Necesitas una masa de hojaldre preferiblemente de mantequilla, tomates cherry, una mozzarella fresca, ajo, aceite de oliva y albahaca fresca o seca.
- Confita los tomates una vez lavados en aceite de oliva con los ajos a fuego suave con sal y pimienta.
- Colócalos en el fondo de una sartén o molde redondo y no demasiado alto que pueda ir al horno.
- Coloca encima la masa de hojaldre y pínchala con un tenedor.
- Hornea a 200°C, calor arriba y abajo, durante unos 20 minutos o hasta que esté dorado.
- Para desmoldarla, dale la vuelta sobre un plato, distribuye la mozzarella bien escurrida en trozos, añade algo de pimienta y albahaca o incluso orégano.
Champiñones al horno
Es una receta básica pero que admite varias versiones. Eso sí, necesitamos unos champiñones enteros que tengan buen tamaño.
- Lo primero es limpiarlos sin sumergirlos en agua y quitarles los tallos.
- Enciende el horno a 190°C.
- Y ahora puedes optar por picar ajo, perejil, y pan rallado. Pones un montoncito en el centro de cada champiñón, lo riegas con aceite de oliva y al horno. Otra opción más contundente es añadir a esta mezcla jamón. Y para los amantes de la carne, se puede rehogar cebolla picada, carne de salchichas blancas, ajo y hierbas al gusto.
- Déjalos durante unos 20 minutos y listo.
Mejillones a la mantequilla de hierbas
A falta de otros productos del mar que están por las nubes, los mejillones gallegos mantienen un mejor precio y están buenísimos. Esta receta pone un punto algo más refinado para un día de fiesta y no tiene ninguna dificultad.
- Hervimos los mejillones en una olla amplia, sacándolos en cuanto se abran.
- Les quitamos una valva y los dejamos sobre una fuente para el horno.
- Vamos precalentando el horno a 190°C.
- Mezclamos bastante mantequilla que esté a temperatura ambiente, ajo y perejil muy picados.
- Ponemos una porción de la mezcla sobre cada mejillón, metemos un par de minutos al horno para derretir la mantequilla y listos para comer.
Crema de alcachofas con almejas o berberechos (y con opción vegana)
Las alcachofas combinan muy bien con todos los moluscos y con los langostinos. Una crema de alcachofas resulta original, ligera, saludable y fácil, sobre todo si partimos de unas alcachofas congeladas que no tenemos ni que limpiar y mantienen el precio.
- Las hacemos como cualquier crema, con un sofrito de cebolla o cebolla y puerro.
- Añadimos las alcachofas y las rehogamos hasta que se descongelen.
- Incorporamos caldo de verduras (puedes poner también algo de nata para cocinar) y sal. Es mejor que se quede corta de líquido y si lo necesitamos, añadimos de nuevo más adelante.
- Dejamos que cueza todo junto durante media hora a fuego bajo.
- Lo trituramos y colamos.
Cuando lo vayamos a servir, abrimos al vapor dos almejas o berberechos por comensal y una vez abiertos, los ponemos con su concha en el centro del plato, espolvoreamos cebollino fresco y tenemos un primer plato de fiesta.
Si prefieres una opción solo vegetal, en lugar de los moluscos fríe en aceite de oliva una alcachofa fileteada y sírvela sobre la sopa.
Lombarda especiada
¿Hay algo más típico para Navidad que la lombarda? Es popular sobre todo en el centro de España, pero ¿en cuántas casas se conserva esta tradición? Es una verdura sabrosa, que da color a la mesa y que está buenísima.
Esta receta es fácil y con producto de temporada. Solo necesitamos una lombarda pequeña, un par de dientes de ajo, un puñado de piñones y otro de pasas, aceite de oliva, sal, pimienta, clavo y canela.
- Mientras hervimos la lombarda cortada en tiras finas, rehogamos en la sartén los dientes de ajo en aceite de oliva, los sacamos y los reservamos en el mortero.
- En el mismo aceite añadimos los piñones, los tostamos, sumamos la lombarda escurrida y lo rehogamos todo. Luego añadimos las pasas.
- Machacamos los ajos que habíamos reservado con unas bolitas de pimienta y un clavo o dos, lo añadimos junto a un poquito de agua de la propia cocción de la lombarda, espolvoreamos canela y probamos el punto de sal.
- Dejamos que cueza cinco minutos y ya tenemos la lombarda festiva.
Salmón en caldo corto con mayonesa tuneada
Esto sí que es fácil. El salmón es un pescado que suele gustar y que se encuentra sin dificultad en todas las superficies. El caldo corto es una técnica que se utiliza poco, pero es fácil y efectiva. Consiste tan solo en elaborar con antelación un caldo corto, es decir, rehogar en aceite zanahorias, cebollas y ajo picados en trozos gruesos, añadir la misma cantidad de agua que de vino y hierbas aromáticas a tu gusto, además de sal.
- Se deja que hierva un par de horas para que tome sabor.
- Lo dejas enfriar antes de meter dentro los lomos de salmón, ponerlo a fuego lento y taparlo.
- Tiene que hervir apenas, muy suavemente, hasta que veas que está a tu gusto. Es mejor dejarlo algo jugoso.
- Al mismo tiempo, cuece unas patatas de guarnición para completar el plato.
Puedes acompañarlo con una mayonesa industrial si la tuneas un poco mezclándola con pepinillos, aceitunas verdes, cebolleta y alcaparras picadas, la aligeras con algo de limón y una puntita de mostaza y te marca una salsa tártara.
Pavo o pularda en escabeche a la antigua
Esta es una receta tradicional que Karlos Arguiñano recogió en su famoso libro 1.069 recetas de cocina, no solo es sencilla, sino que se puede hacer el día antes. Lo normal es hacerlo con pavo, mejor pava que es más pequeña y tierna, pero también se puede hacer con pularda o incluso con un pollo de corral. Eso sí, necesitas una cazuela grande para que te quepa el ave.
- Salpimienta el pavo y ponlo en una cazuela con una cabeza de ajos entera, cebolla en trozos, hojas de laurel y bolas de pimienta negra. Puedes añadir otras hierbas a tu gusto.
- Añade el doble de aceite que de vinagre hasta casi cubrir, es decir, si pones un litro de aceite de oliva, pon medio de vinagre blanco de vino o de manzana que es más suave, y añade sal.
- Ponlo a cocer a fuego suave bien cerrado, hasta que esté tierno. Si es pavo puede tardar en torno a dos horas. Para ver si está hecho, pincha la pechuga y comprueba que esté tierna.
Guarnición de frutas de otoño
Lo mejor para acompañar el escabeche es una salsa que contraste, en este caso las frutas secas le van de maravilla.
- Coge frutas secas surtidas (orejones de melocotón y de albaricoque, ciruelas negras, pasas...), puedes incorporar también unas nueces, y lo hierves todo con mitad de agua y mitad de vino blanco y un poco de azúcar.
- Cuece a fuego lento un cuarto de hora, hasta que quede una salsa algo caramelizada pero líquida.
Ensalada de berros y rabanitos
Imprescindible tener una ensalada a mano para acompañar en las comidas festivas los excesos de proteína. Esta es saludable, sabrosa y con ingredientes al alcance de cualquiera. Necesitas un manojo de berros o canónigos, rabanitos y apio tierno.
- Lava bien las verduras, corta los rábanos y el apio y mézclalo todo.
- Aliña con una vinagreta con aceite de oliva, vinagre, una cucharada de salsa de soja y bastante pimienta negra. Sin sal porque la salsa de soja ya la lleva.
Ensalada de frutas con sirope de cítricos
Un postre de frutas. Para que las macedonias no sean una mezcla de cualquier cosa te recomiendo que hagas primero un sirope.
- Cuece en una cacerola tres cucharadas de azúcar con otras tres de agua y añade pieles de limón, lima o naranja. Una vez disuelto y frío va a servir para endulzar nuestra ensalada.
- Mezcla frutas que no se oxiden para que conserven buen aspecto, mezcla colores e incorpora algunas hierba o especia. Por ejemplo, naranja, frambuesas, dados de mango y hojas de menta. También peras, arándanos, mandarina, canela en polvo y pimienta rosa molida.
- Elige las frutas que más te gusten y ya tienes un postre saludable, refrescante y ligero.