“No me puedo morir antes de recibir mi platita”: La inquietud de los profesores de la deuda histórica
¿El próximo jueves? Es la pregunta que reiteran al despedirse un grupo de docentes afectados por la deuda histórica que llegaron, como todas las semanas, al óvalo de Plaza de la Constitución. Pese a que este lunes se concretó el envío del proyecto que busca reparar el perjuicio salarial que inició en dictadura, las y los profesores no piensan -ni por un minuto- cesar en su lucha hasta recibir el monto prometido de $4,5 millones.
“Hasta que me paguen pretendo seguir viniendo“, afirmó Silvia Bustos, antigua dirigente del gremio, quién ejerció la docencia en Isla de Maipo y Talagante -donde actualmente vive-.
Entre risas por vivencias de sus años activos en la profesión, el grupo de profesores esconde una preocupación. “No me puedo morir antes de recibir mi platita“, coinciden de manera general.
Bustos cumplirá 76 años esta segunda semana de diciembre, por tanto, con pesar reconoce que le corresponderá recibir su pago recién en 2027, solo si la iniciativa no se entrampa en el Congreso Nacional. Apesar de un accidente en la cabeza que la dejó en la UCI, la docente dice gozar de buena salud. “Yo no me pienso morir, me tienen que pagar primero. Tengo que viajar”, repitió.
“Mi familia me dice ‘tienes que cuidarte para que puedas gozar de la plata’. Yo quiero viajar, eso es lo único que quiero. Me queda por conocer, yo conozco hasta Horno Pirén. Y lo otro es que mi hijo hizo el servicio militar en Putre, y yo conocí Putre, pero no conocí el lago Chungará”, añadió Bustos.
– Pero es en la altura… (acotó una de sus colegas)
– Pero si yo no tengo problemas con la presión po‘. Por eso me tienen que pagar luego.
“Teníamos una miseria de sueldo”
A su lado, escuchando atentamente, se encuentra María Consuelo Gutiérrez, quién trabajó 40 años de servicio como profesora general básica, “hacíamos de todo”, recalcó. Trabajó en Isla de Maipo, casi toda su carrera, en el campo Monte Las Mercedes, donde solo tenía locomoción dos veces al día.
“Yo le doy gracias a Isla de Maipo porque me dio la oportunidad de realizarme, trabajé toda la vida ahí, bueno, una parte, porque, cuando nosotros fuimos traspasados, los colegios interiores se cerraron y tuvimos que salir a la parte urbana y ahí ya definitivamente me quedé. La experiencia que yo viví fue muy linda”, recordó orgullosa.
Su semblante cambió al consultarle por los efectos que generó el descuento en su sueldo tras el traspaso a los municipios y recordar la pérdida de beneficios, “realmente nos dañó”, dijo. “Fue irrisorio, teníamos una miseria de sueldo, ya no teníamos trienios, cargos de responsabilidad, te reconocen el título, pero no lo otro, incluso perfeccionamientos que tú tenías, ¿cuánto tuvimos que luchar para que reconocieran los perfeccionamientos”, cuestionó.
“Fuimos traspasados en el 81′ y 82′ (dictadura), ahí no podíamos hacer nada, había que escuchar y agachar, había que asumir, silenciosamente, pero cuando tuvimos la oportunidad de organizarnos, nos organizamos”, aseguró.
María Consuelo lamenta que, según la división por grupo etario, sería la última en recibir el monto porque recién está entrando a los 70 años. “Imagínate que me muera antes“, dijo.
En esa línea, sostuvo que “me queda la tranquilidad de que fuimos reconocidos. En el fondo, fue como un reconocimiento así que lo miro como que al final nos tomaron en cuenta y dijeron, sí, estos profes sí están, existen, si hay una deuda. Yo admiro los profes que venían todos los jueves a hacer presencia es admirable y somos consecuentes”.
“Yo encuentro que de alguna manera también los profesores, todos los que estuvimos, educamos, estamos educando que a pesar que alguien no nos escuche, pero siempre en algún momento va a tener que suceder algo y fue el momento. Sinceramente yo me siento agradecida”, afirmó.
“Ojalá en el Parlamento subieran un poquito los montos”
La semana pasada Mario Priore cumplió 75 años. Fue profesor durante 47 años de educación técnica profesional en diferentes lugares, incluyendo el Instituto Nacional de Capacitación Profesional de Chile (INACAP), donde fue dirigente sindical. Toda su vida enseñó mecánica y administración, incluso -para perfeccionarse- realizó dos pasantías en Japón.
“La afectación no fue solamente para mí, sino para toda mi familia. Con cuatro hijos en aquellos tiempos recibir un sueldo menor con un 25% descuento, que corresponde más o menos a la deuda histórica, causó muchos estragos y también en las pensiones, porque se ve reflejado finalmente en las bajas pensiones, especialmente para las mujeres”, sostuvo.
Desde hace 18 años (2006) Mario acude hasta el frontis del Palacio de La Moneda, junto hasta hace unos años al dirigente jubilado, el fallecido profesor Gustavo Méndez Araya.
El profesor es uno de los que pretende seguir con las posibilidades judiciales que sean necesarias. “Personalmente la sensación mía no es de las mejores, no obstante que reconozco el cumplimiento de la palabra del gobierno, pero los montos y los plazos realmente son muy exagerados, de tal manera que no existe una conformidad en gran parte de los profesores víctimas de la deuda históricas en este caso”, sostuvo.
Priore toma, por ejemplo, los 846 profesores que fueron por el camino de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. “No pretendemos que sea lo mismo para nosotros. Ellos en promedio ganaron 85 millones y el que menos ganó fueron siete millones, el que más ganó fueron 338, pero eso es importante que para llegar a esa cifra, ambas cifras, el primero, la deuda era solo de dos millones y el segundo era de 333, sumaron cinco millones más porque la Corte Interamericana estableció 5 millones de daños y perjuicios para todos por igual”, afirmó.
El profesor deposita ahora sus fichas sobre el Congreso Nacional: “Uno sueña un poquito que ojalá en el Parlamento subieran un poquito los montos y acortar los plazos”.
Para Priore, el pago lo utilizaría para “evitar otro prestamo más, estamos acostumbrados nosotros a fin de año a conseguir un prestamos de 4 millones. Va a ser para eso, tapar una ventanita de deudas”.
“La gente tenía miedo”
“Efectivamente la gente fue muy maltratada“, ratificó la vicepresidenta nacional del Colegio de Profesores, Patricia Muñoz, indicando que, como la deuda histórica inició en dictadura, muchos profesores optaron por el silencio por los maltratos a nivel económico y psicológico. “La gente tenía miedo“, afirmó.
“Se aguantaron muchas cosas por miedo, comprenderás que murieron cualquier cantidad de profesores en aquella época, entonces decir ¿cómo pudieron haber aguantado harto? Esa es una de las respuestas”, señaló.
Personalmente, para la histórica dirigente del gremio docente los montos no son suficientes, pero ante una carrera contra el tiempo, sostiene que fue un 82% los que aprobaron la oferta del Ejecutivo. “Hay que respetar la voluntad de los profes y no hacer negocio“, dijo.
“Hay gente que está promoviendo que estos profe, en esta situación de noventa y tantos años, vayan a los tribunales internacionales ¿cuántos años más vamos a esperar? Hay cosas que no se pueden comprar como el tiempo“, afirmó.