Liderando el cambio
Cuando llegamos a la alcaldía en 2015, la ciudad ya destacaba por sus indicadores económicos, su calidad de vida, su conexión con la naturaleza y su oferta educativa, deportiva, comercial, familiar y de ocio. Pero le faltaba un elemento sin el que ya no podía competir: la innovación, no solo tecnológica, sino entendida en un sentido amplio, el de transformaciones basadas en conocimiento y que generen valor. Partiendo de esa premisa, nos preguntamos cómo queríamos que fuera Las Rozas en 2030, cómo mejorarla. Para responder a esta cuestión lanzamos una estrategia basada en la escucha de las necesidades y aportaciones de los ciudadanos, de las empresas y los emprendedores, de los investigadores y los expertos. Se trataba de conocer a fondo nuestro ecosistema y nuestro talento para luego conectar a esos actores y diseñar un plan consensuado y ambicioso. Este proceso se materializó en la creación de Las Rozas Innova, la Empresa Pública de Innovación y Desarrollo Tecnológico del Ayuntamiento, que nos ha permitido captar talento e inversiones y llegar a donde la Administración Pública no llegaba. Desde el primer día, comprendimos que debíamos liderar la transformación para hacer de la ciudad un espacio más sostenible y confortable. Eso requería una Administración eficiente y ágil, así que iniciamos una revolución empezando por nuestra propia casa. Hemos pasado de una administración basada en el documento a otra basada en el dato, un cambio cultural en el que los funcionarios y empleados están haciendo un gran esfuerzo para aprender nuevas formas de trabajar que mejoren el servicio a los ciudadanos. Eliminamos procesos obsoletos y digitalizamos todo lo que podemos. A nuestra llegada casi no había trámites telemáticos a disposición de los vecinos; hoy son 348, y todas las tasas municipales pueden pagarse con Bizum. El 80% de lo que entra por registro en nuestro Ayuntamiento, lo hace de forma telemática. Son avances importantes, y más en un municipio como el nuestro, muy disperso y el tercero más extenso de la región. Ya no podemos gobernar basándonos en estimaciones, sino en datos. A esa necesidad responde la digitalización de 'la casa' y muchos de nuestros proyectos, con los que estamos introduciendo tecnologías como la Inteligencia Artificial y el Internet de las Cosas (IoT). Estamos integrando nuestra gestión en una Plataforma de Ciudad Inteligente. Controlará y analizará los datos de los sistemas IoT situados en edificios inteligentes, alumbrado público y otras muchas infraestructuras. Permitirá una gestión más eficiente de los servicios públicos, lo que hará de Las Rozas una ciudad conectada, sostenible e inteligente. También construimos alianzas nacionales e internacionales, porque sabemos que para llegar lejos debemos ir acompañados. Las Rozas preside la Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI), con 147 municipios que suman más de la mitad de la población del país. Colaboramos con decenas de ciudades europeas en proyectos de innovación e investigación. Trabajamos con el Intelligent Community Forum, que nos ha declarado una de las 21 comunidades más inteligentes del mundo. Y hemos emprendido el proyecto Madrid Oeste Tecnológico (MOT) con las ciudades de nuestro entorno, alineadas con las políticas de la Comunidad de Madrid, el motor económico de España. Aquel plan que empezamos a esbozar hace casi una década se ha materializado en proyectos pioneros de mejora de la ciudad que han convertido Las Rozas en lo que anhelábamos: un polo de innovación y un referente tecnológico no solo en España, también internacional. Los resultados saltan a la vista. Hemos reducido un 60 % la huella de carbono del municipio, plantado más de 14.000 árboles y promovido la movilidad y la energía sostenibles y la gobernanza eficiente. Somos ciudad líder en los rankings de desarrollo empresarial, atracción de inversión y talento digital. Hoy, Las Rozas es un imán para el talento y las inversiones. Seguiremos así, haciendo buena la frase de Henry Ford: «El verdadero progreso es el que pone la tecnología al alcance de todos».