Cómo evitar comprar un coche de segunda mano con el cuentakilómetros manipulado
El kilometraje es uno de los indicadores clave del desgaste de un vehículo, por lo que muchos conductores confían en él a la hora de comprar un coche. Sin embargo, esta cifra no siempre es precisa, especialmente en los coches más antiguos. El cuentakilómetros, un dispositivo diseñado para medir la distancia total que un vehículo ha recorrido durante su vida útil, «a menudo es el objetivo de los estafadores que buscan manipular sus lecturas y engañar a los compradores», según explican desde CarVertical. Según un estudio realizado por la empresa, basado en los historiales de los coches usados, la mayor probabilidad de comprar un automóvil con el cuentakilómetros manipulado es solo uno de los muchos riesgos que enfrentan los compradores cuando el kilometraje es elevado. Las investigaciones muestran que a medida que aumenta el número de kilómetros en el cuentakilómetros, también lo hace la probabilidad de que el vehículo haya sufrido daños a lo largo de su vida útil. Entre todos los vehículos comprobados, los coches que tenían entre 250.000 y 300.000 km en el cuentakilómetros fueron los que habían sufrido más accidentes: el 51,8% de estos informes tenían registros de daños. La probabilidad de obtener un automóvil con un historial de daños aumenta del 29% al 33,1% tras superar la marca de los 50.000 km, y cada 50.000 km adicionales eleva aún más este riesgo. Por ejemplo, mientras que el 38,4% de los coches con un kilometraje entre 100.000 km y 150.000 km tenían registros de daños, esta tasa aumentó otro 3,7% para los vehículos con un recorrido entre 150.000 y 200.000 km. Según el portal Autocasión , para los vendedores, resulta muy fácil aumentar el precio de venta de sus vehículos reduciendo la cifra reflejada en el cuentakilómetros. Esta práctica resulta más sencilla incluso cuando se trata de dispositivos digitales, ya que detectar que éstos han sido trucados se convierte en una tarea más complicada. El verdadero riesgo al que se exponen los compradores confiados no es sólo tener que pagar por el vehículo un precio superior al que le corresponde, sino incurrir en más gastos después de la compra, ya que el coche estará más deteriorado de lo esperado y podría haberse saltado alguna revisión. La consultora británica HPI, los consumidores pueden seguir una srie de consejos para identificar si el cuentakilómetros de un coche hja sido manipulado. Asegúrate de que los kilómetros que figuran en la factura de la revisión concuerdan con los que marca el cuentakilómetros. Para comprobar que los kilómetros recorridos cuando vendió el coche coinciden con los que marca el cuentakilómetros. Confía en tu instinto y busca cualquier prueba que demuestre que el coche haya sido trucado. En ocasiones, los vendedores lo trucan antes de la primera impresión del comprador y lo devuelven a su kilometraje real en el momento de la compra. Asegúrate de que coinciden. Busca señales de desgaste y deterioro en el coche; ¿si el vehículo tuviera los kilómetros que dice el vendedor, estaría el volante tan gastado?. Por otra parte CarVertical señala que los informes del historial del vehículo pueden ofrecer información valiosa sobre el pasado de un automóvil, incluido el historial de daños y cualquier discrepancia en el cuentakilómetros. Esto podría permitir a los compradores eliminar la asimetría de información y comprender mejor la condición real del vehículo. En España la manipulación del cuentakilómetros se vuelve significativamente más común una vez que un vehículo supera la cota de los 200.000 kilómetros. El 6,2% de los coches comprobados en CarVertical con un kilometraje entre 200.000 y 250.000 kilómetros presentaron reducciones de kilometraje. Para poner esto en perspectiva, la probabilidad de comprar un coche manipulado en este rango es 3,5 veces mayor en comparación con los vehículos de bajo kilometraje (0-50.000 km). Así, la tasa de manipulación mostró solo un ligero aumento para los coches con un kilometraje entre 50.000 y 100.000 kilómetros, pasando del 1,7% (0-50.000 km) al 2%. Esta tasa se mantuvo similar para los vehículos de hasta 150.000 kilómetros (2,2%). No obstante, saltó al 3,9% después de los 150.000 km y siguió subiendo a medida que aumentaba el kilometraje . Después de superar los 250.000 km, la tasa de manipulación del cuentakilómetros aumentó hasta el 12,1%. Si bien descendió al 10,4% para los coches que tenían un kilometraje entre 300.000 y 350.000 km, unos 50.000 km adicionales duplicaron la tasa de manipulación hasta el 20,5%. Los coches con entre 400.000 y 450.000 km en el cuentakilómetros tenían el mayor riesgo de ser manipulados en España (24,4%). Esto indica que las probabilidades de comprar un automóvil manipulado en este intervalo de kilometraje son de aproximadamente 1 de cada 4.