Así son los nuevos lentes con impresión 3D que ya están en México.
Hace poco menos de dos meses, IUNOK, una innovadora firma de fabricación de anteojos graduados a medida, inauguró su flagship store en la colonia Roma, en Ciudad de México, un espacio que combina diseño, tecnología y experiencia para redefinir la manera en que los clientes interactúan con sus productos.
Durante nuestra visita, tuvimos la oportunidad de platicar con Guillermo Chávez, cofundador de la marca y quien nos compartió detalles sobre el proceso de fabricación, el enfoque único de la marca y la respuesta de los clientes a esta innovadora propuesta.
¿Puedes profundizar en cómo es el proceso de fabricación de los lentes en IUNOK?
Todo comienza con un escaneo facial detallado, que captura las medidas exactas del rostro del cliente. Esto genera un archivo digital que utilizamos para crear los armazones mediante impresión 3D en Alemania utilizando tecnología láser SLS. El material principal es Nylon 12 en polvo, un plástico extremadamente ligero y resistente que permite una personalización precisa.
Una vez que el armazón toma forma, pasa por un proceso de limpieza y lijado que garantiza un acabado suave. Después viene el teñido químico, donde aplicamos colores duraderos y vibrantes. Actualmente ofrecemos siete colores básicos que seleccionamos después de extensas pruebas con nuestros clientes. Finalmente, ensamblamos cada lente con precisión milimétrica para asegurar un ajuste perfecto.
¿Qué diferencia hace el uso de la impresión 3D en IUNOK?
La impresión 3D nos permite ofrecer personalización a un nivel industrial. Es un proceso innovador que combina diseño digital con una fabricación sostenible y eficiente. La ventaja es que podemos producir lentes personalizados sin depender de inventarios masivos, lo que reduce desperdicios y asegura que cada par sea único.
Respecto a la experiencia que los clientes viven en la tienda. ¿Qué es distinto?
Nuestra tienda está diseñada para ser más que un punto de venta; es un espacio educativo y experiencial. Queremos que los clientes entiendan todo lo que hay detrás de un par de lentes IUNOK, desde la tecnología hasta los valores de personalización y sustentabilidad.
Cuando los clientes llegan, les damos una atención personalizada desde el inicio. Realizamos el escaneo facial en tiempo real y les mostramos cómo funciona el proceso. También pueden tocar y probar los lentes, sentir su ligereza y apreciar la calidad del diseño. Es una experiencia que genera confianza, especialmente porque estamos introduciendo algo completamente nuevo en el mercado.
¿Cómo han respondido los clientes al showroom?
Ha sido muy positivo. La mayoría de las personas que vienen al showroom terminan comprando, porque entienden el valor del producto cuando lo ven y lo prueban. Además, el boca a boca está funcionando muy bien. Un cliente satisfecho trae a sus amigos y así vamos creciendo. Esto nos confirma que el showroom fue una decisión acertada para dar a conocer la marca.
¿Cómo equilibran la tecnología con la estética en sus diseños?
Es un desafío interesante. Queremos que nuestros lentes no solo sean técnicamente avanzados, sino también visualmente atractivos. Contratamos diseñadores que se inspiran en ciudades icónicas, como París o Mérida, para dar un toque único a cada modelo. Además, los nombres de los lentes son unisex y reflejan nuestro compromiso con un diseño universal.
¿Cuál es el valor añadido que reciben los clientes al visitar la tienda?
Más allá de los lentes en sí, se llevan conocimiento y confianza. Entienden cómo sus lentes están diseñados específicamente para ellos, y eso crea un vínculo especial con la marca. Además, les explicamos los beneficios de nuestros productos, como la ligereza, la durabilidad y el ajuste perfecto. Todo esto contribuye a que cada cliente se sienta único y valorado.