Manuel Alejandro Cardenete, sobre los contratos del SAS: «En muchas ocasiones se abren diligencias que quedan en nada»
El presidente de la Cámara de Cuentas de Andalucía, Alejandro Cardenete , ha asegurado sobre la evaluación de la Fiscalía del Tribunal de Cuentas de los contratos del Servicio Andaluz de Salud (SAS) por una posible responsabilidad contable que «en muchas ocasiones, no solamente en la Cámara de Cuentas, se abren diligencias, se abren imputaciones, que quedan en nada y nadie se acuerda después de que aquello quedó en nada y el titular fue que hubo una imputación». «Se abrieron diligencias, a mí se me comunicó, nos pidieron la documentación y la Fiscalía cerró», continúa explicando sobre ese procedimiento de responsabilidad contable a instancias de la Fiscalía del Tribunal de Cuentas a raíz del informe de la Cámara de Cuentas sobre la contratación del SAS en 2020 y que concluyó con su cierre después de no apreciar responsabilidad contable en un procedimiento de reintegro de fondos públicos. En el transcurso de una entrevista con Europa Press, Cardenete afirma sobre la repercusión de esa iniciativa de la Sección de Enjuiciamiento del Tribunal de Cuentas que «genera ruido mediático y es un arma arrojadiza entre los partidos y ahí ni entro ni salgo». Explica que en un reciente encuentro de todos los órganos de control externo «se lo explicitamos a la presidenta del Tribunal de Cuentas, que, además me tocó a mí, porque en este momento soy presidente de la asociación de todos los órganos de control externo de España », a quien le plantearon «que el año pasado todas las diligencias previas, todas, se cerraron». «Como le decía un presidente de una Cámara de Cuentas: presidenta, es que nos hace quedar en una situación incómoda que Fiscalía abra diligencias con, a veces, cierta alegría», indica Cardenete, quien avisa de que «hay que tener cuidado porque eso implica después una lectura política». Sitúa la participación de la Fiscalía del Tribunal de Cuentas en la contratación de emergencia del SAS durante la pandemia de coronavirus, que evalúa el Juzgado de Instrucción número 13 de Sevilla con la implicación de la Fiscalía Anticorrupción tras una denuncia del PSOE de Andalucía , en el hecho de que «nuestros informes se elevan a Madrid, todos tienen que ser elevados a Madrid» y a partir de ese momento «la Fiscalía del Tribunal de Cuentas de España en muchas ocasiones observa algún detalle y abre diligencias previas». «¿Qué ocurre? Que a nivel mediático provoca mucho nerviosismo», continúa argumentando en ese sentido. Reconoce también que «nos genera un malestar porque si abre diligencias la Fiscalía, te surge la duda a ti, en mi caso la Cámara de Cuentas de Andalucía, de que los informes lo hemos hecho mal». El máximo responsable del organismo autonómico de fiscalización externa acepta como «lógico que se hagan lecturas políticas» con la premisa de que «no dejamos de ser un órgano de extracción parlamentaria», antes de esgrimir que «estoy elegido por seis años , independientemente de que haya elecciones o de quien las gane, seguiré siendo consejero y en su caso presidente de la Cámara de Cuentas en el posible segundo mandato que pueda tener». Preguntado por la repercusión judicial que pueda tener esa decisión del Tribunal de Cuentas de desechar la responsabilidad contable y el reintegro de dinero público , cree que «son órganos diferentes» y que en estos momentos «hay una denuncia de un partido concreto sobre los contratos SAS, donde el juez actual lo ha admitido y, a partir de ahí, lo que el juez quiera recabar o para él sea pertinente, es una cuestión suya». «La separación de poderes no la inventé yo, la inventó Montesquieu y creo literalmente en ella», asegura en este sentido. «Lo que le influya o no le influya, su señoría será el que determine si le influye o no», prosigue explicando, para remarcar que «nosotros hemos hecho nuestro trabajo y el Tribunal de Cuentas hizo el suyo, que al final ha quedado nada». El presidente de la Cámara de Cuentas de Andalucía argumenta que «cuando a veces nos dicen que la Cámara de Cuentas no sirve para nada, que no podéis denunciar y, sobre todo, enjuiciar, digo que todos los informes van a Madrid y se revisan; si detectamos algo, lo explicitamos y ellos abren el trámite». Reconoce entonces que «como representante de la Cámara, que a mis funcionarios se pudo haber puesto en entredicho su trabajo, también me puede molestar». «A nuestros funcionarios se lo hago ver, que todo documento que escriben tiene una trascendencia muy importante », remacha su reflexión en este sentido. Ensalza entonces el trabajo del personal de la Cámara de Cuentas por cuanto explica que «lo repito en todas mis comparecencias, yo no hago el informe, yo no he escrito las 600 páginas» del informe de la Cuenta General de la Junta de Andalucía 2023, que acaba de entregar al presidente del Parlamento, Jesús Aguirre. «Ni yo ni mis seis consejeros, lo hacen los funcionarios de la casa, que han aprobado una oposición. A partir de ahí, los consejeros analizamos, matizamos, centramos, pero no hacemos el informe», remacha su reflexión.