Encierros, vaquillas y capeas mantienen las celebraciones por encima de las 2.000
Los costes que supone un festejo no sólo por la compra del animal, sino también los de ambulancia, médico, director de lidia, veterinario... Las complicaciones a la hora de encontrar una res de la edad que marca la norma –dos ó tres años, por lo general– entre una cabaña ganadera que sigue acusando los ajustes que infligió el rejonazo de las restricciones del Covid-19, menguándola en más de 30 por ciento. O el «enorme papeleo». Todo suma entre los 'peros' para organizar un festejo taurino. Aún así, son muchos los pueblos –y también ciudades – de Castilla y León en los que no se concibe la fiesta sin los astados como protagonistas de uno, dos, tres y hasta más de... Ver Más