Asalta en Granada a una monja de más de 70 años, la arrastra por el suelo y se lleva su bolso
Robarle a una persona mayor y con las facultades físicas mermadas es un delito especialmente ruin. El que ha cometido en Granada un hombre de 20 años al que, entre otras cosas, se le achaca el haberle quitado «de manera violenta» 460 euros, el teléfono móvil y varios décimos de lotería a una monja de más de setenta años. Por este presunto robo y por otros dos, ha sido detenido por la Policía Nacional y un juzgado ha ordenado su ingreso en la prisión provincial de Albolote. La Policía Nacional ha especificado que se trata de un individuo sin antecedentes. En el caso de la religiosa, el robo se produjo cuando ésta se dirigía a una iglesia en el distrito Norte de la capital. Le dio un violento tirón al bolso que llevaba en bandolera y se lo arrebató. Al joven se le atribuyen, incluyendo éste, tres robos con violencia e intimidación, uno de ellos en grado de tentativa, tras haber asaltado en una misma mañana a tres mujeres en la calle. A dos de ellas les quitó el bolso, pero con la otra no lo consiguió. Madrugó para actuar. El primero de los robos se produjo a las ocho de la mañana en una avenida del citado distrito Norte. Una mujer que iba andando a su trabajo observó que un hombre que hasta entonces iba por la acera de enfrente hacía comenzado a seguirla. Instantes después fue « abordada por la espalda y golpeada varias veces en la cara» . El hombre intentaba al mismo tiempo llevarse el bolso, pero ella lo impidió y él escapó huyendo. Media hora más tarde lo volvió a intentar y esta vez sí consiguió su objetivo. La víctima era también una mujer que iba a trabajar y que, al ver que le perseguía, se dio la vuelta «para encararse con él». La consecuencia fue que recibió «un fuerte empujón» que la hizo chocar contra la pared de un edificio. Después, el hombre tiró del bolso y se lo llevó. Dentro había sólo 24 euros, pero también la documentación y una tarjeta bancaria. Debió parecerle poco, porque a las 9.15 abordó a la monja que iba a la parroquia. Su acción «fue tan violenta» que provocó que la mujer cayera al suelo y fuera arrastrada hasta que soltó el bolso, donde llevaba el dinero, los décimos y el móvil. El hombre fue detenido esa misma mañana y le fueron intervenidos todos los efectos robados.