Un asesor inmobiliario explica si puedes hipotecar una casa prefabricada: «Cuatro requisitos»

Los altos precios de la vivienda , tanto para compra como para alquiler, han generado una crisis en este mercado. Hay mucha demanda y poca oferta , con lo que los precios en los últimos años se han disparado. Para solucionar el problema se han aprobado medidas que pretenden impactar en el bolsillo de los compradores o inquilinos como un nuevo índice de referencia para renovar las rentas o avales ICO para jóvenes. No obstante, hay personas que desean explorar vías alternativas que, además, resulten más económicas. Una de las opciones que se manejan es la posibilidad de adquirir una vivienda prefabricada para instalarla en un terreno urbanizable. Existen empresas especializadas en el diseño y la instalación de este tipo de hogares. Los diseños son variados y también los precios, que se pueden adaptar a todo tipo de bolsillos . Las hay baratas por menos de 20.000 euros hasta mucho más caras que superan los 100.000. Al explorar esta opción sin tener un ahorro significativo, muchos se preguntan si es posible hipotecar este tipo de casas. El asesor inmobiliario Daniel Rubio dedicó un vídeo a esta cuestión en su cuenta de TikTok. «Se puede hipotecar siempre que sea un bien inmueble» , responde el experto a la pregunta. Añade que «cualquier cosa que se considere un bien inmueble está sujeta a poder hipotecarse». Sin embargo, para que algo tenga esta categoría debe cumplir, según este abogado, cuatro requisitos : «Tiene que estar en un terreno urbanizable, tiene que estar anclado al suelo, tiene que estar visado por un arquitecto, tiene que haber un proyecto detrás, y tiene que estar registrado en el registro de la propiedad». Es por esto que Rubio concluye que siempre que se cumplan estos cuatro requisitos la persona tiene derecho a acudir a su entidad bancaria a solicitar una financiación . A la hora de comprar una casa prefabricada hay que tener en cuenta que se deberán asumir gastos e impuestos más allá de la propia compra. Entre ellos se encuentran la instalación por parte de operarios, licencias urbanísticas, cédulas de habitabilidad, registros de la propiedad, altas de suministros, IBI, escrituras o impuestos sobre cosntrucciones, instalaciones y obras.