El Ayuntamiento de Toledo retirará el amianto de las cubiertas de 10 edificios municipales antes de 2028
El Ayuntamiento de Toledo retirará el amianto de diez edificios municipales antes del año 2028, fecha límite propuesta para erradicar este material de los inmuebles públicos . Así lo han informado técnicos municipales durante la reunión del Consejo Local de Medioambiente, y han añadido que se tendrán en cuenta varios datos para priorizar la urgencia: el número de trabajadores en el edificio, el año de construcción del mismo y la cercanía a zonas sensibles de riesgo. También han especificado que la retirada de 1,5 metros cuadrados de amianto tiene un precio de unos 3.000 euros, y que la eliminación de este material de edificios privados deberá hacerse antes de 2032 . En la reunión del Consejo Local han intervenido por conexión digital técnicos de la empresa que ha realizado el mapa del amianto en la ciudad de Toledo, «un censo difícil de hacer y que llevará años», según el ingeniero Isaac López, «un proyecto que va estar vivo y que va a tener que evolucionar». La primera fase del censo del amianto en Toledo se ha centrado en las cubiertas y en una segunda fase se notificará la presencia de este material en interiores. Este mapa ha causado cierta «alarma» entre los empresarios del Polígono Industrial , por los altos costes previstos para su retirada, y entre los vecinos de Santa Bárbara, cuya asociación va a reivindicar con urgencia mediciones de fibras en el aire, como se hizo en el barrio del Polígono. La representante de la Federación Empresarial Toledana (Fedeto) en la comisión, Arancha Heredero, ha mostrado la preocupación que esta información está causando en los empresarios, que al pinchar en el mapa en sus empresas ven cómo fecha máxima de retirada el próximo 1 de marzo, y dados los metros y la cantidad de este material cancerígeno en sus cubiertas, obtienen cifras elevadas para invertir en esta operación. La representante de la Asociación de Vecinos' El Tajo' y de la Federación Vecinal, Sonia Méndez, ha advertido que tras conocerse el mapa del amianto, «el resto de la ciudad ya no va a poder ignorar el problema». Y ha señalado que cuando 'El Tajo' comenzó a denunciar los problemas en 2008, «se nos tomó por locos» y se circunscribió el problema a un único barrio, el Polígono. «Entonces íbamos al polígono industrial a contar los peligros y nos ignoraban por los altos costes», y ha mostrado su alegría porque ahora sea un problema de toda la ciudad. El técnico de la empresa redactora del censo también ha apuntado gran parte del amianto de la ciudad ha llegado al final de su vida, lo que no quiere decir que sea un peligro de vida o muerte en la actualidad, sino que va aumentando el riesgo. El nuevo mapa, elaborado mediante un sistema de teledetección por satélite, identifica las cubiertas de la ciudad que contienen materiales de fibrocemento o amianto, por lo que, gracias a esta información, el Ayuntamiento de Toledo podrá iniciar actuaciones de retirada en instalaciones municipales y, al mismo tiempo, informar a los propietarios de edificios privados sobre la conveniencia de sustituir las cubiertas afectadas. El presidente del Consejo Local de Medio Ambiente, Rubén Lozano, ha recalcado que el amianto «no es un problema de un solo barrio, sino de toda la ciudad», y ha insistido en que el ayuntamiento afrontará esta cuestión «con planificación, transparencia y rigor técnico».