Huachicoleo gasolinero, azucarero y camaronero socavan ingresos fiscales y comprometen seguridad
Ya no sólo el huachicol fiscal o contrabando de combustibles, sino ahora también el azucarero y el camaronero socavan los ingresos del Estado.Además, MILENIO descubrió que incentivan las prácticas criminales, debilitan cadenas productivas, desplazan mercados legales y comprometen la seguridad:EnergéticaAlimentariaIndustrialIngreso de mercancía con alteracionesEl fraude en azúcares consiste en introducir supuestas mezclas alimenticias con hasta 98 por ciento de azúcar y cantidades mínimas de otros ingredientes para reclasificar los aranceles.Mientras que en el mercado del camarón se detectó el ingreso de mercancía reempaquetada, en cargamentos valuados en 6 mil millones de pesos.Así lo advirtió Alfonso Ramírez Cuéllar, vicecoordinador parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados, al subrayar que tan sólo el mercado ilícito de gasolina y diésel provocó, el sexenio pasado, una afectación estimada de 28 mil 200 millones de dólares (unos 505 mil 900 millones de pesos) a Pemex y a Hacienda.Por ello, la Comisión de Hacienda en el Palacio de San Lázaro acordó la creación del Grupo de Trabajo sobre el Código Fiscal de la Federación y Legislación sobre Comercio Exterior que, encabezado por Ramírez Cuellar, se encargará de integrar las propuestas para combatir de manera integral ese tipo de fraudes fiscales y aduanales en México.Evasión de impuestosEn su análisis para MILENIO, el legislador detalló que el huachicol fiscal se configura al importar combustibles declarados como aditivos o lubricantes para evitar el pago de impuestos al momento de cruzar las aduanas del país.“Dado que el combustible se compra barato en el extranjero y se puede comerciar cerca del precio de la gasolina legal, la diferencia termina en manos de la red delincuencial y no en la hacienda pública”, argumentó Cuellar.Además, explicó que, al importar un litro de diésel, en las aduanas mexicanas se deben pagar 7.1 pesos de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) si se declara conforme a la ley.Pero para eludir dicho gravamen, las organizaciones criminales ingresan por tierra con pipas de hasta 60 mil litros de combustible, pero declarando otro contenido, con una ganancia de al menos 400 mil pesos por impuestos no pagados por cada unidad.“Si llega por mar, un sólo buque que contiene alrededor de 10 millones de litros de combustible y se introduce como huachicol fiscal representa, cuando menos, una ganancia de 71 millones de pesos por los impuestos evadidos”, señaló Ramírez Cuéllar.El diputado urgió por ello a diseñar una política pública integral y fortalecer el marco jurídico vigente mediante una serie de reformas.Entre ellas planteó una modificación al Código Fiscal de la Federación para equiparar la marcación de combustibles con la política de marbetes y precintos, además de mejorar la tipificación de los delitos fiscales.Propuesta de ajuste en IEPS e IVACuéllar propuso asimismo ajustes a las leyes del IEPS y del IVA para añadir la marcación como elemento indispensable para poder acreditar estos impuestos, y a la Ley Federal de Derechos para establecer el pago de derecho de marcadores conforme a la cuota establecida para los permisionarios obligatorios.Además, una nueva Ley Federal para Prevenir y Sancionar el Mercado Ilícito de Hidrocarburos, Petrolíferos y Petroquímicos para establecer los mecanismos, autoridades competentes, así como procedimientos relativos al tiempo, forma en que se inyectará el marcador a los petrolíferos y se verificarán controles volumétricos.Huachicol azucarero: pérdidas por 37 mil mdp y evasión fiscal de 5 mil millones de pesos.Con pérdidas por 37 mil millones de pesos para la agroindustria cañera y una evasión fiscal de 5 mil millones, el contrabando de azúcar, tanto técnico como bronco, introdujo al mercado mexicano más de 330 mil toneladas de este alimento entre 2022 y 2024, lo que se agrava con la operación de ingenios irregulares en Puebla, Oaxaca y Veracruz.Contrabando 'bruto' y pago de arancelDe acuerdo con el análisis “Fraudes fiscales y aduaneros en México” de Alfonso Ramírez Cuéllar, el contrabando técnico de azúcar se ha consolidado como una de las principales formas de evasión fiscal.Además, la modalidad más extendida consiste en introducir supuestas “mezclas alimenticias” con 95 a 98 por ciento de azúcar y cantidades mínimas de maltodextrina, harina, chocolate o carbón activado para reclasificarlas en fracciones arancelarias con cuotas inferiores a la delazúcar de caña.Sólo en 2023-2024 ingresaron 272 mil toneladas bajo esta figura, aunque la Cámara Nacional de la Industria del Azúcar (CNIAA) estimó más de 329 mil 450 toneladas ilegales, con una evasión fiscal superior a 5 mil millones de pesos.“A ello se suma la existencia de contrabando bruto o bronco (ingreso clandestino sin pasar por aduana) y la operación de ingenios irregulares en Puebla, Oaxaca y Veracruz que producen alrededor de 120 mil toneladas adicionales, evadiendo obligaciones fiscales, ambientales, laborales y de seguridad social”, subraya.Dichos ingenios han impedido incluso inspecciones del Comité Nacional para el Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar (Conadesuca) y de la Secretaría del Trabajo, comercializando marcas como Zucaroso y Dulcam, que afectan al mercado formal.La crisis del sector se profundizó por la coincidencia de tres factores:Sequías severas en 2021/22, 2022/23 y 2023/24, que redujeron la producción nacional de 6.1 a 4.7 millones de toneladas.Importaciones masivas en 2023/24, que aun pagando el arancel de 360 dólares por tonelada, generaron una sobreoferta de 68 por ciento y caída en los precios al mayoreo.La entrada creciente de azúcar vía contrabando técnico y bronco, que supera las 330 mil toneladas y ha provocado pérdidas de 37 mil millones de pesos.“Las consecuencias económicas son profundas: caída de hasta 50 por ciento en la rentabilidad de los cañeros, riesgo para 90 por ciento de los productores con parcelas menores a siete hectáreas, distorsión del precio interno y un deterioro del consumo nacional aparente de azúcar, el cual ha caído 3 por ciento mientras aumenta el uso de jarabe de maíz de alta fructosa”, concluye.Ingenios “huachicoleros”En un recorrido por algunos de los ingenios presuntamente involucrados con el “huachicol, azucarero” en Veracruz y Puebla, MILENIO constató incipiente o nula actividad. Después de que en el ciclo 2024-2025 los cañeros quedaron a deberle a los dueños de las plantas procesadoras, pues el precio final del azúcar quedó 200 pesos debajo de lo estimado por tonelada, la mayoría de los ingenios azucareros de Veracruz no han iniciado zafra.El olor a dulce que invade los pueblos y ciudades donde se ubican los ingenios no se percibe; tampoco se observan las chimeneas humeantes, signo inequívoco de que hay molienda."Huachicol azucarero"Entre los ingenios veracruzanos se encuentran algunos presuntamente relacionados con el llamado “huachicol azucarero”, con el cual ingresan azúcar disfrazada para pagar menos impuestos.En Veracruz, el ingenio San Cristóbal, el llamado “Coloso de América”, ubicado en Carlos A. Carrillo, propiedad de Zucarmex, —empresa perteneciente al Grupo Azucarero México (GAM)—, produce el azúcar Zucarozo.Zucarozo,una de las marcas del dulce presuntamente involucradas en la evasión fiscal.En tanto, la otra marca, Dulcam, utiliza azúcar procedente de diversos ingenios del país, la mayoría del Grupo Piasa, propietaria del ingenio como el de Tres Valles, Veracruz.La empresa se ubica en Tuxtepec, Oaxaca, donde también tienen el ingenio Adolfo López Mateos.Aunque a inicios de noviembre inició la zafra en la zona cañera de Coxcatlán, Puebla, y la molienda en la Compañía Energética de Vigo SA de CV, propietaria de la marca Zucaroso, el panorama real dista de ser positivo.Organizaciones del sector han encendido las alarmas ante el creciente “huachicol azucarero”, una práctica que continúa golpeando gravemente al mercado formal y que involucra, incluso, a ingenios que hoy operan en completo hermetismo.Mientras Energética deVigo promueve su zafra en Coxcatlán como un impulso económico regional, el sector formal exige aclarar los señalamientos y pide al gobierno federal una intervención urgente.En el último año, energética de Vigo ha fortalecido su infraestructura en esta región, ampliando su capacidad de molienda hasta absorber casi la totalidad de la producción cañera de la región, este año se espera una molienda de 135 mil toneladas.Huachicol camaronero; contrabando de 6 mil millones de dólaresEl legislador morenista Alfonso Ramírez Cuéllar alertó sobre el creciente contrabando de camarón a México,por lo que detalló que tan solo entre 2021 y 2022 ingresaron de forma ilegal 35 mil 740 toneladas valuadas en más de 6 mil millones de pesos.A ello se suma un desplazamiento de hasta 80 por ciento del producto sinaloense, lo que compromete la operación de más de 900 granjas y cerca de 20 mil empleos directos, afectando a un sector que aporta 40 por ciento del camarón de cultivo nacional y 96 mil empleos totales.La expansión del mercado ilegal del crustáceo ha sido documentada en ciudades estratégicas como:TijuanaCancúnCuliacánCiudad de MéxicoGuadalajaraTamaulipasNayaritEn estos estados se ha identificado mercancía reempaquetada, sin trazabilidad o con etiquetado falso.Entre los mecanismos utilizados destaca la triangulación de camarón ecuatoriano, con un estimado de entre 20 y 22 mil toneladas anuales, vía Centroamérica.Además de su ingreso por cruces fronterizos del norte como Tijuana, Ciudad Juárez, Reynosa y Matamoros.Paralelamente, se ha constatado la importación irregular de producto originario de India, China, Estados Unidos y Tailandia, incluso sin hojas de requisitos sanitarios, lo que revela fallas de control y posibles actos de contubernio institucional.También se ha detectado la utilización de etiquetas que declaran origen de Perú o domicilios en Guatemala para encubrir el verdadero país de procedencia.“La magnitud del problema es alarmante y las consecuencias incluyen caída de precios, riesgos sanitarios por mercancía sin trazabilidad, pérdida de soberanía alimentaria, prácticas monopólicas y una creciente concentración del mercado”, advierte.En tal escenario, el Senado de la República ha exhortado a las secretarías de Agricultura y de Marina, así como a la Agencia Nacional de Aduanas, a reforzar la vigilancia en puertos y fronteras para contener un fenómeno que amenaza la estabilidad productiva y la legalidad en la cadena pesquera.KL