Kirian pide su deseo de Navidad: «Me lo debo y me lo merezco»

«Me siento querido en todas las islas, no solo por la faceta de jugador, que para mí también es importante; sino también por lo que he pasado. Pero me gusta, sí, que me digan que gusta el Kirian jugador», enuncia el tinerfeño, en una entrevista en Radio Club Tenerife.

Según cuenta, recibe muestras de afecto dentro del fútbol y fuera de él. «Ya no solo de la gente del fútbol, que soy un fanático de este deporte y me gusta ver hasta los partidos de Tercera División; sino también gente que ha pasado por procesos como el mío. Siempre he intentado ser servicial en todo lo que he podido», apunta.

«Empiezo en la Escuela Municipal de Candelaria, porque mi familia se crio junto al campo de fútbol. Mi hermano y yo siempre nos escapábamos para entrar por la puerta de atrás, y de ahí salen los amigos que son los de hoy. En infantiles marcho al Tenerife y ahí aprendí muchísimo. Cuando eres niño juegas a disfrutar, a divertirte; pero luego en los equipos y a medida que van pasando los años, agradeces la formación que te dieron. Gracias a eso, sé a día de hoy lo que es la basculación, mantener la posición y tantas otras cosas. Por eso estoy tan feliz de haber pasado por el Tenerife: me formaron muchísimo».

Como recientemente dijo Ayoze Pérez de su cesión al San Andrés, apunta Kirian que para él fue determinante su año de préstamo a un equipo distinto del CD Tenerife. «Para mí, el año del Ofra me vino bien. Los viajes en Armas a las cinco de la mañana, el día que ganabas había bocadillo, y luego cuando sale la oportunidad de Las Palmas, cuadró todo porque la carrera universitaria que yo quería estaba aquí».

«Ese año lo recuerdo con mucho cariño, y sigo manteniendo relación con mucha gente con la que coincidí allí. Era el año de Segundo de Bachillerato, y además ese año me centré mucho en los estudios. Entrenábamos muy de noche, y aprovechaba la tarde para estudiar», apunta.

«Cuando salgo al Ofra ya no pienso que puedo llegar a ser futbolista. En Candelaria ganabas todos los partidos, en Tenerife ganaba todo también, siempre ganaba. En el Tenerife, eso era lo normal. Y cuando vas al Ofra fue como bajar al suelo y darte cuenta de todo: los viajes ya no eran en avión, no había muchas más facilidades, teníamos solo una equipación…», sugiere.

«Siempre lo he dicho: para mí, yo no era el mejor. En el Tenerife nunca llegué a serlo. En Las Palmas, empiezo a jugar en febrero. En el primer equipo, prácticamente igual. Nunca he sido el mejor pero sí muy constante: trabajo, trabajo y más trabajo. Los elegidos con una varita llegan con 17 años ;el futbolista profesional trabaja, llega con 23 y luego su auge está entre los 28 y 32, cuando entiendes el juego y alcanzas la madurez. Creo que he ido quemando esas etapas», es otro de los mensajes más sinceros que deja la conversación.

Para el 20 de la UD Las Palmas, «los malos momentos son fase de aprendizaje».

«Para mí, mi mejor momento como futbolista no fue en Primera; fue en Segunda cuando perdimos el playoff con el Tenerife. Es cuando yo me siento y me hago futbolista. En Primera todo tiene más repercusión», dice a la hora de hacer balance de una carrera con varios capítulos aún por descubrir. «Quiero volver a ser el mejor Kirian; me lo debo, y me lo merezco», sentencia.

La llamada que lo cambia todo

«En marzo, pasando Carnavales tenemos un partido aquí contra Las Palmas. Perdimos 6-0 y mi padre estaba en la grada. Tonono habla: ,el chico del Ofra muy bien, ¿quieres el teléfono de él? A Telde vinieron a verme. La primera semana de marzo, remontamos con uno menos y recuerdo jugar muy, muy bien. Incluso tengo la foto (de ese partido) colgada en casa», rememora Kirian.

«Me llamaron en el instituto, cuando estaba en el recreo. Yo tenía pensado que, si la nota me daba, haría Ingeniería Industrial en la ULPGC. Hubo un poco de suerte, casualidades de la vida, porque yo ya había sondeado otras opciones. Por ejemplo, entrenar con el Acodetti y jugar los fines de semana con el Ofra. Pero todo cambia con esa llamada que me ofrecía venir a la residencia de Las Palmas, a la Casa Amarilla», añade.

En cuanto a ser tinerfeño y jugar en la Unión Deportiva, responde. «La rivalidad se ha vivido con tranquilidad. Mi padre decía: yo no soy de Las Palmas, soy del 20 de Las Palmas».

«Quiero volver a ser el mejor Kirian»

En la conversación, el de Candelaria se refiere al estilo y a su predilección por un fútbol combinativo, de posesión y gobierno. “No lo celebras igual [un triunfo] que en un partido que fuiste dominante y sentiste que todo el juego pasó por tu equipo”, reflexiona.

También explica cómo actúa si en un determinado momento no toca jugar como más le gusta. “¿Incómodo? Incómodo no; porque creo que por características te pueden adaptar a un montón de formas de juego. Pero te sientes más representado o haces las cosas con más cariño, o vas con más ímpetu, cuando tu ideología futbolística va a la par que la del club. Si todos decimos: vamos a jugar desde atrás porque queremos el balón, al final el resultado va a ser armónico. Si no, el equipo se puede partir. ¿Qué depende del entrenador también? Sí, pero el fútbol es más de los futbolistas”, responde.

Como pez en el agua

A renglón seguido, explica que la fisonomía y estilo de la UD Las Palmas le han venido como anillo al dedo. “Aquí he encontrado el sitio en ese aspecto. Me he sentido muy identificado con la forma de jugar. Encima, con la llegada de Pimi, que viene del ADN Barça, nos ayudó mucho y nos dio un plus. Lo mismo que Luis García. Con esa forma de jugar, te acabas gustando, te diviertes. No es solo que estés haciendo un trabajo, sino mucho más. De otra manera, serías una marioneta que va sobre el campo haciendo determinadas cosas”.

Uno de los pasajes más virales a través de las redes, que se ha emitido en los días previas, es en el que expresa la siguiente idea: “Me encanta, me gusta aprender. Yo con los entrenadores que más me he relacionado ha sido porque he aprendido; no tiene nada que ver que haya jugado. Prefiero aprender que jugar siempre y no aprender nada. Me encanta ir absorbiendo conocimiento, conocimiento y más conocimiento. En el momento quizá dices: esto no me apetece, no me gusta.. pero con los años te das cuenta de que venía bien”.

Kirian revela cuáles eran sus inquietudes cuando era más joven, que decidió estudiar Ingeniería («eso va porque me gustaba saber cómo funcionaban todas las máquinas”) y que, según cree, no hubo ofertas por él en el momento donde alcanzó su particular prime como futbolista, ahí donde llegó a estar en la prelista de la selección española absoluta.

También se refiere al proceso de recuperación de la enfermedad, ofrece detalles de las dos veces («la segunda la he llevado de forma más personal», confiesa) y relata también momentos puntuales de esta etapa que no había contado en público hasta la fecha.

The post Kirian pide su deseo de Navidad: «Me lo debo y me lo merezco» first appeared on udlaspalmas.NET.