El Govern contradice a Junts y defiende que los decretos anticrisis no invaden competencias ni paralizan la amnistía
El Govern no va a seguir a Junts en su batalla contra los decretos anticrisis del Gobierno, que se votan en el Congreso este miércoles. El Ejecutivo catalán niega los principales argumentos de Junts para oponerse a las iniciativas, que no considera que invadan competencias autonómicas, tampoco que supongan de entrada un agravio económico, ni que paralicen el desarrollo de la ley de amnistía. Al contrario, el Govern de Pere Aragonès considera que incorporan muchas medidas económicas beneficiosas para los catalanes, incluido el traspaso a la Generalitat del ingreso mínimo vital (IMV), una medida muy perseguida desde Catalunya.
"Los servicios jurídicos de la Generalitat han examinado los decretos y aseguran que no hay invasión competencial", ha asegurado la portavoz del Ejecutivo, Patricia Plaja, que también ha asegurado que, sobre la cuestión económica, Economía siempre mira el reparto de fondos europeos para reclamar compensaciones en el caso que haya un perjuicio para Catalunya.
Sobre la amnistía, Plaja ha dicho que sigue su curso tal y como se acordó y se ha atrevido a pronosticar que será "una realidad este año 2024". "El Govern ha mirado con lupa estos decretos y por mucho que pique, la ley de amnistía va a llegar al Congreso. Europa ya reconoce la posibilidad de hacer lo que permite este decreto y por tanto no hay novedad", ha abundado.
Respecto a la idea de Junts de multar a las empresas que mantengan sus sedes fuera de Catalunya, el Govern también lo ha ninguneado. Por un parte, Plaja se ha mostrado contraria a los incentivos fiscales para las empresas que vuelvan, considerando que sería un agravio para aquellas compañías que se quedaron. Por otro lado, ha indicado que la ley de sociedades ya obliga a las empresas a tener su sede social donde tienen la mayor parte de sus intereses económicos. Finalmente, Plaja ha exhibido los buenos datos de inversión extranjera para asegurar que el Govern no está en este momento centrado en la cuestión de las empresas que cambiaron de sede social en 2017.
Por todas estas razones, el Ejecutivo considera que los argumentos de Junts para oponerse a los decretos no tienen recorrido. "Son decretos necesarios sobre los que no debería hacerse gesticulación", ha insistido Plaja.
El choque entre el Govern y Junts ya se había intuido este lunes, cuando los dos grandes partidos independentista mostraron opiniones diametralmente diferentes sobre los decretos anticrisis del Govern. Este martes Junts continúa sosteniendo que no darán su voto favorable a las iniciativas parlamentarias, por lo que reclaman que el Gobierno los retire para volver a presentarlos una vez se consensuen.