Al menos 15 muertos durante una huelga policial que acabó con saqueos en la capital de Papúa Nueva Guinea

Al menos 15 muertos en la capital de Papúa Nueva Guinea durante una huelga policial este martes que ha terminado en saqueos generalizados e incendios provocados en Puerto Moresby. El primer ministro del país del Pacífico Sur hacía un llamamiento a la calma tras un día de protestas que se tornaron desagradables. Ocho personas murieron en los disturbios de la capital mientras que otras siete perdieron la vida en Lae, en el norte del país, informó la cadena australiana ABC. Las imágenes de televisión mostraron a miles de personas en las calles de Puerto Moresby, muchas de ellas portando lo que parecía ser mercancía saqueada, mientras un humo negro se cernía sobre la ciudad. El Primer Ministro de Papúa Nueva Guinea, James Marape, declaró en una rueda de prensa celebrada el jueves que las tensiones en la capital se habían calmado, y que se había enviado más policía para mantener el orden. «La policía no trabajó ayer en la ciudad y la gente recurrió a la anarquía, no toda la gente, pero sí en ciertos segmentos de nuestra ciudad» , declaró el jueves en rueda de prensa. Una tienda saqueada en Puerto Moresby afp La embajada de Estados Unidos en Puerto Moresby dijo que la policía había vuelto al trabajo, pero que las tensiones seguían siendo altas. «La relativa calma puede cambiar de un momento a otro», afirmó en un comunicado, añadiendo que había recibido informes de violencia en otras zonas del país. Varios ciudadanos chinos resultaron heridos leves, y las tiendas de propiedad china fueron objeto de actos vandálicos y saqueos, según la embajada del país. El Primer Ministro australiano, Anthony Albanese, declaró que el Alto Comisionado de su país estaba supervisando la situación, y que Canberra no había recibido ninguna petición de ayuda de Papúa Nueva Guinea, país al que apoya regularmente en materia de policía y seguridad. «Seguimos instando a la calma en estos momentos difíciles. No hemos recibido ninguna petición del gobierno de Papúa Nueva Guinea en este momento». La policía del país de las islas del Pacífico ha tenido que hacer frente a un aumento de la delincuencia violenta en el último año . Marape ha afirmado que reforzar la seguridad ayudaría a atraer inversión extranjera a los recursos de oro y cobre de Papúa Nueva Guinea. La policía se declaró en huelga el miércoles por la mañana tras descubrir una reducción en sus pagas . El gobierno difundió mensajes en las redes sociales negando que se hubiera impuesto un nuevo impuesto a la policía, y Marape se comprometió a corregir cualquier error administrativo que hubiera causado el recorte salarial. Un funcionario declaró el miércoles a la radio local que sin la policía la ciudad había «perdido el control».