Salarios: cuánto perderán contra la inflación hasta marzo y el efecto paritarias
El plan del ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo con la meta del equilibrio fiscal en 2024 a partir de un ajuste del 5% del Producto Bruto Interno (PBI), tiene víctimas y una de ellas es el salario. Cuyo futuro final no será el mismo para el conjunto.
Pese a que aún no se puede predecir cuál será la caída real en los doce meses, un informe de Ecolatina reveló que en el verano como mínimo perderán un 10% de su valor, a causa de que la inflación entre diciembre y marzo promediará en un 20%.
A la cual contribuirá en gran medida el dato que dará a conocer esta tarde el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Tras semanas de especulación, se sabrá si el Índice de Precios al Consumidor (IPC) en diciembre se ubicó por encima o debajo del 30%.
Para los meses posteriores, en Ecolatina proyectan que la recesión, ya anunciada por el Gobierno, convivirá con acuerdos salariales, lo que harán que el eventual descenso de la inflación sea más lento. Siendo esta la principal variable por la cual se evaluará el éxito del Gobierno.
"Todo este proceso tendrá costos -sociales y políticos- que estos se combinarán con un latente riesgo de espiralización en tanto el oficialismo tenga dificultades en llevar a cabo su plan fiscal-monetario u obtener al menos una parte de las reformas propuestas en el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) o la ley ómnibus", destacaron en el informe.
Frente a este escenario, el rol protagónico se lo llevarán las paritarias, aunque desde la consultora ya alertan que será muy difícil que logren un "empate". Y es ahí donde se pone en duda la supuesta premisa liberal de no entrometerse al tratarse de acuerdos entre privados.
Pese a que aún no se puede predecir cuál será la caída real en los doce meses, un informe de Ecolatina reveló que en el verano como mínimo perderán un 10% de su valor, a causa de que la inflación que entre diciembre y marzo promediará en un 20%.
Sostienen que, si se diera la situación extrema de que los salarios se indexarán de facto y no les perdieran pisada a los precios, "la inercia inflacionaria no sólo no se cortaría, sino que, además, estará latente el riesgo de una pronta espiralización".
En esas negociaciones, el punto de partida ya es dispar entre los trabajadores del sector público y privado. Fue el propio presidente, Javier Milei, quien declaró que los trabajadores del estado -que sobrevivan a los recortes- no recibirán aumentos.
El escenario opuesto también tiene consecuencias negativas para el Gobierno. Ya que, si bien la inflación bajaría a causa de una demanda agregada débil, la recesión de la actividad impactará sobre el humor social.
La rapidez en la desaceleración de precios dependerá de la diferencia a la que corran los salarios y los precios. Pero en la medida que se aleje del domingo de balotaje del 19 de noviembre, donde La Libertad Avanza (LLA) consiguió el 55,69% de los votos, el apoyo podría debilitarse.
"El camino a desandar contendrá elementos de cada escenario", aseguraron en Ecolatina. Y detallaron: "Habrá una combinación de paritarias bimestrales/trimestrales que buscarán "ganarle" a los precios, con otras de ajustes mensuales -algunas virtualmente indexadas-, donde seguramente también proliferen las sumas fijas para compensar un alicaído poder de compra".
La antesala al plan de Caputo
En cuanto aterrizaje en diciembre pasado, en Ecolatina aseguraron que, por el acortamiento de las paritarias, los salarios lograron seguir de cerca a la inflación en buena parte del 2023. Lo que se reflejó en el sostenimiento del consumo privado, el cual estiman que creció un 1% con respecto al año anterior.
Una situación que se revirtió en el último bimestre con la aceleración de precios. Luego del descenso de octubre, donde el IPC se ubicó en 8,3%, en el anteúltimo mes del año subió al 12,8% con proyecciones más altas para el de diciembre. "[Esto] llevó a que casi la totalidad de los sindicatos que monitoreamos llegue en rojo al cierre del año", concluyeron.