Estas son las monedas que utilizaron los celtas
La moneda es uno de los testimonios arqueológicos más importantes para el conocimiento de las sociedades celtas. Auténticos objetos parlantes, documentos emanados directamente de los poderes gobernantes, supervivientes materiales de antiguos Estados desaparecidos, son un elemento fundamental para entender realidades difíciles de aprehender por otras vías. Pero su relevancia va más allá de su obvio uso económico: a través de ellas podemos definir las estructuras políticas en las que se organizaban los pueblos celtas, acercarnos a su organización territorial, conocer nombres de ciudades y personas o atisbar la mentalidad de quienes decidieron acuñarlas y de quienes, en definitiva, las usaron. Sin embargo, de la teoría a la práctica hay un buen trecho. El mayor problema —o estímulo— es que no existe una moneda celta, sino muchas.]]>