Ocupar y quemar casas de civiles: el nuevo método de destrucción del Ejército israelí en Gaza
En el pasado mes, el tercero de la ofensiva israelí en Gaza, los soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) han empezado a prender fuego a viviendas civiles, con todo lo que hay en su interior, dejando que se quemen hasta los cimientos, para que sus habitantes no puedan volver a vivir en ellas. Ese es el método que han empleado para destruir cientos de edificios, con base en las órdenes recibidas de sus comandantes, "sin el permiso legal necesario para hacerlo", ha desvelado el periódico israelí Haaretz.
Las IDF han respondido a estas informaciones asegurando que la destrucción de los edificios sólo se lleva a cabo por medios "aprobados" y que se evaluará "cualquier acción llevado a cabo de forma diferente". Preguntado por este nuevo método, un comandante del Ejército ha dicho al periódico israelí que los edificios son seleccionados para ser quemados con base a información de Inteligencia.
Otros tres oficiales del Ejército, que encabezan los combates en Gaza, han confirmado a Haaretz que quemar las casas se ha convertido en una práctica común. Un comandante de uno de los batallones desplegados en la Franja dijo a sus soldados, mientras se preparaban para retirarse de una zona: "Quitad vuestras cosas de la casa y preparadla para la incineración".
El diario afirma que las informaciones que ha obtenido apuntan a que esta práctica se ha convertido en algo cada vez más habitual a medida que la guerra se ha prolongado, desde finales de octubre, cuando las tropas terrestres irrumpieron en Gaza. En este tiempo, las IDF han destruido residencias de miembros de Hamás o de habitantes de Gaza que participaron en el ataque del 7 de octubre, que el grupo islamista lanzó contra las poblaciones israelíes cercanas a la Franja y en el que mató a unas 1.200 personas, y secuestró a más de 200. También han sido destruidos edificios de viviendas que eran usados por Hamas o casas situadas cerca de los túneles, que los milicianos han construido debajo de la superficie y que son uno de los principales objetivos del Ejército en su ofensiva.
Según Haaretz, antes de enero, los militares empleaban minas y explosivos, y maquinaria pesada en ocasiones, para demoler los edificios de Gaza; pero a partir de este año han empezado a prender fuego a viviendas de civiles no involucrados en el conflicto, lo cual está prohibido por el derecho internacional, subraya el periódico israelí, que ha sacado a la luz varios abusos cometidos por las IDF desde el comienzo de la guerra.
En los meses que ha durado el conflicto, han muerto casi 27.000 gazatíes, incluidos 11.500 niños, según las cifras de las autoridades locales, validadas por la ONU.