La minoría que nos sobran
Me prometí a mí mismo no volver con estas temáticas para sembrar en el desierto, en razón a no percibir ningún cambio, tanto en esa gran mayoría ciudadana adormecida y anestesiada por los medios, como en general en la hasta hoy minoría disidente autocongelada hasta tiempos más cómodos donde volver a escenarios populares y plazas públicas. Ahí no dejo ni una lágrima del dolor ni una gota del “sudor” que a veces conllevan estos escritos.