Quejas vecinales por la «excesiva» lentitud en las obras de la calle Descalzos, cortada desde el 23 de enero
Dicen estar «desesperados» por la lentitud en las obras de la calle Descalzos , una de las principales vías de acceso al Casco Histórico de Toledo, una calle que está cortada desde el 23 de enero pasado y que «condena» a todo el vecindario a tener que « dar toda la vuelta a la ciudad para llegar a lugares como el paseo del Tránsito o la calle Santo Tomé«. En declaraciones a ABC, los afectados dicen desconocer las razones de esta lentitud, « si es por falta de mano de obra o por algún otro motivo «, pero lo cierto es que »vemos cómo su ejecución se retrasa y el ritmo de las obras es lentísimo «. Aunque consideran que la obra »es necesaria«, a su juicio »está mal planificada«, y afirman estar molestos por el hecho de no haber sido consultados , «ni informados personalmente por nuestro alcalde, que no ha tenido la intención de reunirse con nosotros para ver la forma de perjudicarnos menos», señalan. Cartel informativo del corte en la calzada y la naturaleza de las obras ABC Explican los vecinos que actualmente los obreros que están trabajando en esta obra desde su inicio son «entre cuatro y seis», los cuales, para unos trabajos de estas características, «nos parecen muy pocos». También critican el hecho de que las tuberías de alcantarillado, «con 50 años de uso», no vayan a ser sustituidas . En lugar de ello, «solo serán reparados los trozos en mal estado, si es necesario, no sabemos si por criterio de los técnicos municipales o por los de la empresa», añaden. «Esta calle, una de las más anchas del Casco, se podría haber ejecutado como se hizo en calle Reyes Católicos , ejecución de la mitad de la calzada y circulación por la otra mitad, y luego lo contrario; pero claro, es un coste mayor para la empresa, y lo que menos parece importar es el perjuicio de los vecinos y residentes del Casco. Otra cosa muy importante que se pasó por alto con el cierre total de la calle en los dos sentidos es el perjuicio económico que se le va a causar al pequeño comercio de barrio , un sector que ya está muy escaso en el Casco. Si estas obras se dilatan en el tiempo, llevaran al cierre definitivo de estos pequeños establecimientos, pero vitales en el día a día del residente, con el daño que esto nos provocará en nuestra vida cotidiana«, argumentan. Por ello, piden a los responsables municipales que tomen medidas, «que miren más por el ciudadano y por los vecinos del centro histórico, que somos los que mantenemos la vida en las partes antiguas de nuestras ciudades , y que obliguen a quien corresponda a que agilice las obras y establezca medidas para que la ejecución de esta vía necesaria para la ciudad se haga a la mayor premura y con el menor daño posible al vecino«.