Monumento a la penuria

En la plaza de Ópera , como atrio de la contigua plaza de Oriente , tienen montado unos cuantos vagamundos su pícnic de cartonaje. En la noche, y a menudo en el día. De arranque, le da a uno cierta amargura, y también cierta responsabilidad, que una copa de gentes de biografía torcida improvisen su chabolismo inevitable en el corazón monumental de Madrid, pero ahí está ese chabolismo de media manta y latón muerto, donde los desdichados desayunan vino de caja y pan de anteayer. Y a seguir durmiendo la desdicha. Ahí está esa choza de improvisación, alcalde, y me temo que nadie hace nada por esta gente, porque la choza lleva ahí tiempo, y no sé si es la... Ver Más