Presidentes de tribunales superiores de justicia ven con «preocupación» su «permanente descalificación"
Los presidentes de los tribunales superiores de justicia de toda España se muestran «preocupados» por la «permanente descalificación» de sus funciones y de su «legitimidad para decidir», lo que conlleva el creciente deterioro de la imagen de la justicia y el riesgo de que la ciudadanía pierda la confianza en su función. Así lo reconocen en las conclusiones aprobadas tras un encuentro de tres días que ha tenido lugar en Granada y en el que han abordado problemas y retos a los que se enfrentan con un llamamiento claro a los políticos. «Pedimos que cierren, de una vez por todas, con el mayor consenso y sensibilidad, el proceso inacabado -o apenas iniciado- de modernización de la justicia. Recordamos un año más que permanecen invariables grandes retos pendientes: reforzar institucionalmente el poder judicial y r esolver de una vez y para siempre la crisis institucional del CGPJ, en funciones desde diciembre de 2018, y reorganizar y modernizar el sistema actual de Justicia, totalmente superado, que exige una profunda y urgente reforma para resolver los déficits organizativos, estructurales, legislativos y tecnológicos que la lastran desde hace décadas«. Puertas giratorias Sin aludir de forma explícita a las puertas giratorias, consideran necesario establecer «mecanismos legales» que refuercen el estatuto profesional del juez en el ejercicio de su función, «no solo desde la perspectiva formal, sino dotándolo de un contenido material que aleje planteamientos que lleven a una falta de credibilidad por la previa actividad política« de jueces. Noticia Relacionada estandar Si Los jueces recuerdan que ni Sánchez ni su mujer «están al margen de la ley» Nati Villanueva También ven necesario mejorar la imagen del juez ante la sociedad, partiendo de la relevancia de sus funciones e incidiendo especialmente en su profesionalidad, independencia e imparcialidad. La cúpula judicial se muestra preocupada por el «importante déficit» de jueces y magistrados en esta década, como consecuencia de las vacantes que generarán las jubilaciones y la deficiente planificación de las convocatorias de selección para cubrirlas. En este sentido «resulta imprescindible», dicen, que, sin demora, cada año se realicen convocatorias de oposición de jueces entre 310 y 320 plazas, además de las que correspondan a los concursos del cuarto turno. Tribunales de instancia Lejos de planteamientos políticos que abogan por la supresión de las oposiciones, los presidentes de los TSJ señalan que las coberturas en la carrera judicial «debe regirse por los principios de mérito y capacidad, garantizados por los sistemas de oposición para el turno libre y concurso para el cuarto turno, sin que el déficit de jueces y magistrados, producto de la falta de planificación, justifique acudir a sistemas de selección diferentes que no respeten los mencionados principios«. Instan también a que se lleve a cabo la «esperada reforma organizativa de la justicia» española, mediante la implementación de un modelo de tribunales de instancia que permita conseguir «una mayor eficiencia de los recursos humanos y una mayor facilidad para la creación de nuevas plazas de jueces y magistrados donde resulten necesarias, con un menor coste económico, al no conllevar la dotación de un nuevo juzgado completo».