Sam Kerr afronta desde hace meses tiempos difíciles.
A la lesión grave que sufrió a principios de año en la rodilla y la duda que genera su participación en la Eurocopa de este verano, se sumó el
altercado que protagonizó a inicios de marzo con un taxista y, posteriormente, con un policía al que supuestamente insultó al calificar de "estúpido bastardo blanco".
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