Nelly Korda, la chica de moda del golf: sangre de campeones y una racha «sobrehumana»
Cuando Nelly Korda (25) empezó a destacar en el mundo del golf lo hizo a la sombra de sus padres y de su hermana Jessica (31). Los primeros fueron tenistas profesionales en su país natal, Checoslovaquia, con un palmarés apreciable: Petr fue campeón del Abierto de Australia en 1988 y Regina Rajchrtová olímpica en Seúl ese mismo curso. Noticia Relacionada Golf estandar No Scottie Scheffler, número uno mundial del golf, detenido cuando se dirigía al PGA M. Z. Según la policía, intentó saltarse un control de tráfico en su camino al torneo Previamente se habían mudado a Florida, donde nacieron sus tres hijos. Jessica (1993), Nelly (98) y Sebastian (2000), todos ellos deportistas de alto nivel. Ellas golfistas y él, tenista. Hasta ahí, todo más o menos normal, teniendo en cuenta el gen atlético que corre por sus venas. El chaval es el menos destacado, aunque tiene un título del ATP Tour (Parma 21), mientras que Jessica siempre fue la avanzada del clan. Desde 2010 no ha dejado de ganar en el LPGA (suma 6 victorias) y ha sido seleccionada en cuatro ocasiones para la Solheim Cup . Con ese espejo no era de extrañar que Nelly buscara emularla y, por supuesto, superarla en cuanto se hizo pro en 2016. No lo tuvo fácil. El primer año lo disputó en el tour de base Symetra. Al siguiente ascendió a la máxima categoría y en 2018 llegó su primer título (Taiwán). A partir de ahí, todo fue coser y cantar para la de Bradenton. Con tres campeonatos más en la campaña siguiente y un 2020 frenado por la pandemia, en el 21 llegó su auténtica explosión: su primer grande (el WPGA Championsip), el oro olímpico y el número uno mundial. Parecía que su momento no tenía final, pero un trombo en un brazo le frenó la temporada y sólo le dio tiempo a sumar de nuevo a finales de año (Pelican). Por eso, el modo de arrancar 2023 fue espectacular. Firmó grandes contratos publicitarios y al fin superó a su hermana en la lista de ganancias (con la mitad de pruebas disputadas). Ya estaba claro quién era la cabeza de familia. Pese a diversas molestias de espalda, recuperó el cetro universal y ganó su tercer galardón en Europa (Aramco de Londres). Ahora, lo que nadie esperaba, es que en este 2024 su dominio haya sido de los más brutales de la historia. A pesar de estar un poco despistada por el embarazo y parto de su hermana, comenzó una racha victoriosa en enero que le llevó a ganar en cinco torneos seguidos entre el Drive On y el Chevron de abril (su segundo 'major'). Sólo Annika Sorenstam y Lorena Ochoa lo habían conseguido antes. «Es algo sobrehumano, no sé cómo describirlo», declaró entonces Scottie Scheffler , su homólogo en el ránking masculino. Aunque falló hace dos semanas en el Founders (fue séptima) el pasado domingo volvió a lo más alto en el Liberty, con su sexta copa del año. Ya duplica en ganancias a la segunda del LPGA (supera los tres millones de dólares antes de la mitad de la temporada y amasa más de doce en su carrera). Esta golfista no tiene techo.