Así es el diseño de la corona de la Virgen del Rocío
La Redención, al término de la eucaristía semanal de la hermandad de este lunes 17 de junio, ha presentado la presea con la que la Virgen del Rocío será coronada el 5 de julio de 2025 por José Ángel Saiz Meneses, arzobispo de Sevilla. El encargado del diseño ha corrido a cargo de José Delgado López, mientras que la ejecución de la corona va a correr a cargo de Jesús Domínguez . Ambos son dos grandes proyectistas y orfebres con una larga trayectoria. La corona está inspirada en el momento de la fiesta de Pentecostés, una fiesta que tiene lugar 50 días después del Domingo de Resurrección, es el cierre de la pascua. Esta presea de la Virgen del Rocío estará dividida en dos por partes : una primera del canasto, que posará sobre las sienes de la dolorosa como reina del cielo y la tierra y, una segunda en el resplandor, que simboliza la luz divina, «el gran signo aparecido del cielo: una mujer vestida de sol con la luna bajo sus pies y una corona de 12 estrellas sobre su cabeza». Como así se aprecia en la imagen, en la parte del resplandor, se aprecian dos aros . En el exterior figura la cruz situada sobre todo el escenario iconográfico y representa la victoria de Cristo sobre la muerte y el pecado. La citada cruz está inspirada en la de Santiago, por ser titular de la sede canónica de la hermandad. José Delgado ha proyectado la pieza con adornos barrocos y lapidada con pedrería de amatistas, de color morado, que representa la preparación espiritual, la penitencia, la cuaresma y la vigilia. Esta pieza nace del anagrama de la Virgen, a confeccionar con pedrería turquesa, color representativo del Espíritu Santo y relacionado con el cielo y la eternidad. Por otra parte, en el mismo aro exterior, figuran doce cartelas por los doce apóstoles, cada uno de ellos irán repujados y colocados de derecha a izquierda del eje. San Juan y San Pedro son los dos primeros, uno por ser roca y primer Papa de la iglesia, y el otro por ser el más joven y discípulo amado. Los restantes son: San Andrés, Santiago el mayor, San Judas Tadeo, San Bartolomé, San Marcos, Santo Tomás, Santiago el menor, San Matías y San Simón. Finalizando con esta zona exterior, en la parte superior de las cartelas aparecen pebeteros con llamas de puntas, representando las lenguas de fuego de cada uno de ellos. Cierran las doce estrellas que simbolizan las tribus de Israel dibujadas con seis puntas con una perla en cada centro, representando el poder de Dios en el universo y su protección, unidos a los rayos flamígeros y plisados, siendo el resplandor de la divinidad. El soporte de este aro está decorado con la flor de lirio o la azucena , intercaladas con doce cartelillas con piedras amatistas engastadas. En este aro, el interior, figura el coro de ángeles de adoración con las cabezas ebúrneas en un total de diez, haciendo alusión a los diez mandamientos. La corona estará tallada en las dos caras, por lo que en la iconografía de la parte posterior estarán representadas las letanías lauretanas, un total de doce: Estrella de la mañana, rosa mística, arca de la alianza, espejo de la sabiduría, fuente de la salud, torre de David, puerta del cielo, casa de oro, refugio de los pecadores, madre Inmaculada, reina del cielo y vaso espiritual.