La Real Sociedad cerró el pasado sábado en Zubieta no sólo una temporada para el olvido, por su participación liguera, sino también un ciclo. Se acabó la exitosa era de
Natalia Arroyo en el banquillo realista y, de paso, también las etapas como txuri urdin de su segundo
Eder Maestre, que se va al Tenerife como primer entrenador, y de las jugadoras
Alejandra Bernabé,
Iris Arnaiz y la máxima goleadora realista
Synne Jensen, la más dolorosa. Todas fueron debidamente despedidas en el empate 2-2 ante el Levante Las Planas, tras anunciar el club sus salidas un par de días antes.
Seguir leyendo...
