Paso de onda tropical deja inundaciones, deslizamientos y árboles caídos
La onda tropical número 13, un giro ciclónico y la ubicación de la zona de convergencia intertropical confluyen para los aguaceros del cierre de junio
La inestabilidad causada por el paso de la onda tropical número 12 este martes dejó 27 puntos inundados en cantones como Alajuela, Puntarenas, Atenas, Quepos y Abangares, donde el colapso de alcantarillas afectó casas y comercios.
En la escuela de Patio de Agua de Coronado, un desprendimiento provocó la caída de un muro. El incidente no afectó las aulas ni el desarrollo de las lecciones, por lo que el comité municipal de emergencias removió el material sin problemas.
En La Palma de Pérez Zeledón, otro deslizamiento de tierra afectó una casa. Sin embargo, las autoridades indicaron que sus habitantes no quisieron trasladarse donde familiares o a un albergue.
Mientras, en San Miguel de Turrúcares, Alajuela, varias viviendas resultaron anegadas por el desbordamiento del río que pasa por esa localidad. La corriente dañó muebles, electrodomésticos, ropa y enseres de varias familias. Allí hubo 14 personas evacuadas.
Por otra parte, se reportaron caídas de árboles en Chacarita de Puntarenas y Peñas Blancas de San Ramón.
El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) prevé que los aguaceros seguirán durante el resto de la semana, ya que además del paso de la onda número 13, existe un fenómeno llamado giro ciclónico centroamericano que causará inestabilidad el jueves y viernes.
Dicho sistema es similar a una baja presión, pero mucho más extenso. Es generado por circulaciones de viento que giran en sentido contrario a las manecillas del reloj sobre todo el Istmo, explicó Daniel Poleo, meteorólogo del IMN.
Confluyen disturbios
Los giros ciclónicos en el Istmo suelen ocurrir con más frecuencia entre mayo y junio, así como entre setiembre y noviembre.
No son fenómenos nuevos, pues desde hace años han incrementado las lluvias en nuestro país. No obstante, el IMN ha tenido que salir de qué se tratan para combatir la información errónea que se publica en redes sociales.
Esa combinación de eventos, junto con la presencia de la zona de convergencia intertropical sobre el territorio, favorece el ingreso de humedad y vientos desde el Pacífico, lo que genera aguaceros fuertes durante las tardes en ese litoral, principalmente.
Quienes planean salir de viaje este fin de semana, aprovechando el inicio de las vacaciones escolares de medio año, deben considerar que las menores precipitaciones, según se estima, se presentarán en la costa del Caribe.
Sin embargo, debido a las lluvias en Pococí, la ruta para llegar a Limón por el cerro Zurquí podría tener nuevos desprendimientos de tierra, como ocurrió la noche del martes, lo que obligó al cierre de la ruta, el cual prevalecía la tarde de este miércoles.
Mar picado
El Centro de Investigación en Ciencias del Mar y Limnología (Cimar) de la Universidad de Costa Rica informó de que, debido al giro ciclónico centroamericano, habrá viento fuerte entre jueves y viernes en el Pacífico, lo que implica un riesgo para la navegación.
Frente a las costas de Guanacaste, las olas aumentarán hasta 3,5 metros entre jueves y viernes, más del doble que las más altas de este miércoles (1,6 m), y disminuirán a dos metros el próximo domingo. Las ráfagas de viento en el mar se prevén entre 40 y 50 km/h.
En el Pacífico central y sur, las olas aumentarán hasta 2,7 metros entre jueves y viernes, con tendencia a disminuir a partir del sábado.
El sistema de baja presión generará mar picado entre jueves y viernes, por lo que se advierte del peligro para embarcaciones menores de 7 metros y para las que tienen entre 7 y 20 metros de eslora. Se pide precaución para embarcaciones que salen de playas, ríos y esteros.
