Gallos sacan espuelas para desquitarse en pelota cubana
La clave para lograr la primera victoria de Sancti Spíritus en este playoff de cuartos de final estuvo en el picheo hermético
Al cierre de la séptima entrada el equipo de los Gallos espirituanos se paró en pleno del banco de primera para fundir en un abrazo colectivo al diestro José Eduardo Santos, quien lanzó este sábado uno de los mejores juegos de su carrera para igualar las acciones del playoff frente a los Vegueros pinareños.
Sancti Spíritus le devolvió así la lechada del primer desafío a la nave verde, ahora con marcador de dos carreras por cero, donde Santos tuvo el mérito de erigirse figura y mantuvo a raya durante siete episodios en la lomita al mejor equipo del campeonato, como afirmara el propio director de los Gallos, Lázaro Martínez.
A los del centro de Cuba le bastaron los dos capítulos iniciales para definir el cerrado pleito que tuvo en la valla contraria a un digno adversario, el experimentado Vladimir Baños. Justo abriendo el choque, el pimentoso Rodolexis Moreno le pegó al pinareño un doblete al izquierdo, y luego fue fletado para la goma con rodada al cuadro de Frederich Cepeda. Los Gallos ampliaron en la siguiente entrada cuando Carlos Gómez remolcó la definitiva.
Fueron las únicas libertades que permitió el lanzador veguero en toda la ruta del partido, pero esta vez la fuerte artillería de Pinar del Río quedó silenciada por completo frente a su delirante afición y no pudo apoyar la tremenda labor monticular de Baños.
La clave para lograr la primera victoria de Sancti Spíritus en este playoff de cuartos de final, según explicó a Juventud Rebelde su timonel, estuvo en el picheo hermético de Santos, quien no regaló boletos en el juego, y también en las actuaciones de Fernando Betanzo como acomodador y el cierre certero de Yanielquis Duardo.
Con las acciones igualadas a un éxito, ambos equipos viajan hacia los predios del José Antonio Huelga, donde este lunes reanudarán la batalla para disputar el tercer choque. Los gallos han anunciado ya como lanzador del importante juego a Carlos Michel Benavides, mientras que la causa veguera aún no tenía definida su carta abridora.