La madre del joven fallecido durante Sant Joan: «Mi hijo no regresará vivo, pedimos justicia»

La madrugada del 24 de junio, verbena de Sant Joan , una noche que tradicionalmente se llena de luz y alegría, se vio empañada por un trágico suceso que ha conmovido a la comunidad colombiana en Barcelona. La muerte de E.L.M ., un joven de 26 años, de origen colombiano, quien perdió la vida en un acto de violencia brutal , ha dejado a una familia buscando respuestas y clamando por justicia. La familia, compuesta por la madre y los dos hermanos menores del fallecido, está instalada en Nou Barris desde hace un lustro, y aún se encuentra en estado de 'shock' por la muerte de E.L.M., a quien sus familiares definen «como un padre», más tras el fallecimiento del progenitor, que murió en Colombia a la misma edad con la que perdió la vida E.L.M. en la Barceloneta. «Él era el eje de la familia» , lamenta la madre, aguantando el llanto y tratando de mostrar una serenidad cogida con alfileres. A su lado, la novia de E.L.M., tras más de cinco años de relación, recuerda como siempre le llamaba «vida» como apodo cariñoso. Como toda la familia, está destrozada. Los hechos son conocidos. Durante la verbena, el asesinado y uno de sus hermanos intervinieron para defender a unos turistas a los que iban a robar. Los asaltantes, que en un primer momento huyeron, acabaron regresando con ánimo de venganza. E.L.M. fue degollado y murió allí mismo pese a la intervención de los servicios de emergencia. En su piso de Nou Barris, la madre comparte uno de los anhelos de su hijo: «Si algo me sucede, deseo volver a mi tierra natal» . Tienen la pretensión de regresar a su país para enterrar a E.L.M, para lo que esperan contar con la ayuda del Consulado de Colombia en Barcelona. Por lo pronto, ya cuentan con la ayuda del grupo de parapente del Valle de Cauca de Colombia , de la que E.L.M. formaba parte antes de instalarse en Barcelona, y que tiene abierta una colecta para ayudar a sufragar el coste de la repatriación del cuerpo, así como los pasajes de la familia, entre 10.000 y 30.000 dólares. Los parapentistas colombianos, en cuya comunidad la muerte de E.L.M ha causado un gran impacto, realizaron hace pocos días un salto multitudinario a modo de homenaje y para ayudar a la familia de «el flaco», como era conocido allí. «Estamos agradecidos con todos por su apoyo y empatía hacia mi hermano, aun sin conocerlo», expresa a ABC su hermano menor, conocido como 'Chachán'. La familia, que trata aún de superar los hechos, denuncia la «injusta muerte» de E.L.M. que en una noche de celebración que acabó en tragedia solo trataba de ayudar a unos turistas que iban a ser robados. «Este vacío no lo va a llenar nadie y nuestro hijo no regresará vivo», clama la madre del fallecido. «Queremos que esto no se queda así. Pedimos justicia», añade. Familiares de la victima, en un encuentro con ABC, tratan de recomponer los hechos de aquella madrugada para intentar hallar respuestas a lo sucedido. Relatan que la víctima se encontraba en compañía de sus hermanos menores y su novia, ya camino a casa. Durante el trayecto, presenciaron un intento de robo a turistas por parte de dos asaltantes . En ese momento, el joven intervino para impedir el hurto, según relata su hermano menor 'Chachan'. «Fuimos a defender a las víctimas , a las que pudimos devolver el móvil que les intentaban robar», apunta. En medio de este panorama, los ladrones deciden abandonar el lugar, pero al cabo de unos minutos, cuando E.L.M. y sus acompañantes se dirigían hacia la estación del metro de Barceloneta, los asaltantes regresaron para agredir a la familia con ánimo de venganza . «A un amigo y a mí nos golpearon, mientras que a mi hermano le cortan el cuello. En ese momento no nos dimos cuenta por qué nos estábamos defendiendo», detalla el hermano menor, aún conmocionado, junto a toda su familia, por lo sucedido. El ataque resultó letal para E.L.M, quien cayó al suelo mientras se desangraba. A pesar de la rápida llegada de los servicios médicos, no fue posible salvarle la vida. « El agresor fue detenido gracias a la pronta reacción de los agentes de la Guardia Urbana, pero lastimosamente los servicios de emergencia no lograron salvar la vida de E.L.P.». En este sentido, los Mossos lograron detener al presunto asesino, un hombre de nacionalidad argelina, con una edad aproximada de 30 años, quien fue capturado mientras intentaba huir del lugar del crimen. Mientras, el otro implicado, logró escapar. Además de causar la muerte a E.L.M., los agresores provocaron heridas graves al hermano menor: un hematoma en el ojo izquierdo y contusiones en diferentes partes del cuerpo. El dolor físico, sin embargo, es lo de menos. «No estamos bien psicológicamente» , lamenta la madre del fallecido, aún sin entender lo que sucedió en esa trágica noche de Sant Joan.