Benidorm estrena sensores de la calidad del aire en sus calles para competir con otros destinos contaminados

Benidorm ha instalado en sus calles un sistema pionero para medir la calidad del aire que podrán consultar los turistas en cada momento y con el que jugará la baza de las vacaciones saludables frente a otros destinos que sufren una mayor contaminación atmosférica. En la misma línea de comodidad y bienestar para los visitantes, el Ayuntamiento también ha implantado algunas medidas con las que ya consiguió en agosto del año pasado rebajar cuatro grados la temperatura, un alivio que cobra especial importancia con las cada vez más frecuentes olas de calor, tal como publicó ABC . Para este verano, ya se han colocado dos equipos de calidad de estas características en la avenida del Mediterráneo, intersección con Emilio Romero y en la calle Carrasco. Estos dispositivos miden la concentración de diferentes contaminantes, al disponer de sensores para NO2, O3, PM2.5, PM10, SO2, CO, además de medir temperatura, presión y humedad relativa. Los datos se analizan constantemente y se pueden mostrar en un mapa «para tener así un conocimiento y control más rápido de la calidad del aire de la ciudad en cada momento, información que será de consulta abierta antes de que finalice el año», han anticipado fuentes municipales. Además de las instalaciones antes citadas, hay cuatro equipos de calidad del aire nanosensor , ubicados en diferentes puntos del casco urbano y preparados para medir la concentración de CO, SO2, NO2, O3, y las partículas suspendidas en el aire (PM2.5 y PM10), además de registrar las condiciones ambientales térmicas y de humedad. Estos dispositivos deben confirmar los bajos niveles de polución después de haber puesto en marcha medidas para reducir al máximo el tráfico rodado en la zona más próxima a las playas, sobre todo en la zona de Levante, la más concurrida. Con las estrictas limitaciones de velocidad hasta a 10 kilómetros por hora y las restricciones a la circulación de coches particulares, complementadas con los aparcamientos disuasorios gratuitos (7.000 plazas), el Ayuntamiento apuesta por dar prioridad a los peatones. «Habría que hacer una campaña para dar a conocer unos datos espectaculares y aprovecharlo para ser más competitivos », sugiere Alex Fratini , portavoz de la Asociación de Restaurantes de Benidorm y Comarca (Abreca). Este sistema de medición de la calidad del aire, en su opinión, ofrece esa ventaja de «poder comparar con otras ciudades, porque en Benidorm, con poco tráfico y concentrado, la contaminación es muy baja».