Gusano barrenador afecta más a personas encamadas o con discapacidad
El Ministerio de Salud lanzó un vehemente llamado a los cuidadores de personas encamadas o con alguna discapacidad para que extremen las medidas de supervisión, ya que estos pacientes han sido los más afectados por el gusano barrenador en Costa Rica.
Las autoridades sanitarias confirmaron, este martes, que de las 15 infestaciones en seres humanos reportadas hasta el momento en el territorio nacional, la mayoría de casos corresponden a individuos que tienen ese tipo de factores de riesgo que los hacen más vulnerables.
Roberto Castro Córdoba, director interino de Vigilancia de la Salud del Ministerio de Salud, recomendó cuidar las heridas de estas personas, vigilar si tienen llagas en su boca, y revisar sus ojos y su nariz, porque la mosca que provoca la infestación también puede poner sus huevecillos en esos sitios.
“Casi todos los casos en humanos se asocian a personas que tienen problemas de movilidad por diferentes razones. Esto hace que se genere un riesgo importante a su salud. Ellos no se dan cuenta y las personas que están al cuidado no se percatan de que está evolucionando (...) Cuidemos a las personas que tenemos a nuestro cargo”, subrayó Castro.
Gusano barrenador registra mayor incidencia en regiones Huetar y Brunca
Hasta el momento se contabilizan dos muertes en el país por esta causa: una joven de 19 años, vecina de Guanacaste, y una mujer del Valle La Estrella, cuya edad no trascendió. En ambos casos, la infestación se dio en la boca de las pacientes.
El Ministerio de Salud también ha descartado a 29 personas que presentaban otro tipo de infestaciones por otros parásitos, como el tórsalo u otros.
Esta enfermedad fue prevalente en Costa Rica en la década de 1980 y 1990. Se eliminó del país en el año 2000, pero la afectación en ese entonces fue principalmente en ganado y no se vio tanto en personas ni en animales domésticos.
“En su momento no se notificaron los casos de seres humanos, ahora, con el regreso de la enfermedad se diseñó un lineamiento para salud humana y se estableció que serían de reporte obligatorio“, señaló Castro.
¿Cómo se produce la infestación por gusano barrenador?
Los gusanos barrenadores son en realidad las larvas de la mosca Cochliomyia hominivorax. Este insecto deposita sus huevecillos en tejido vivo de un animal, generalmente en heridas abiertas en su piel. En una sola ocasión, puede depositar hasta 300 huevos.
Los huevecillos eclosionan y se convierten en larvas, estas parecen gusanos y por esto es que se le dice “gusano barrenador” o “gusanera”. Las larvas se alimentan del tejido y lo van degradando. El huésped (ya sea persona u animal) siente dolor y también puede percibir cuando las larvas se mueven bajo la piel. A esto se le llama miasis.
En los seres humanos la infestación no es tan severa. Esto es así porque la mosca demora varios minutos poniendo sus huevos y es más común que una persona ahuyente a una mosca a que lo haga un animal. Si hay pocos huevecillos, el impacto es menor.
Sin embargo, cuando una persona tiene dificultad para moverse por sí misma y comunicar el malestar es más difícil que pueda ahuyentar a la mosca y, por eso, la miasis se desarrolla más fácilmente.
“No es la infestación lo que va a poner en riesgo la salud de la persona. Es el tiempo de evolución que se da entre que se inicia la infestación y se comienza el tratamiento”, manifestó Roberto Castro, jerarca interino de Vigilancia de la Salud.
¿Cómo cuidarse del gusano barrenador?
- Mantener la higiene. Esto incluye lavado de manos constante con agua y jabón, pero también la desinfección de heridas según las indicaciones del médico.
- Control y vendaje de las heridas de la piel según lo que el médico indique. No siempre se pedirá tener las heridas vendadas o cubiertas; en algunos casos específicos esto no es así, por lo que el manejo debe ir según lo indicado en el centro de salud.
- Cedazos en puertas y ventanas para prevenir la entrada de moscas al hogar. No son necesarios toldos para dormir, dado que la mosca circula principalmente durante el día.
- Asistir al centro de salud si tiene síntomas.
Estos son los síntomas a los que debe prestarse atención:
- Dolores en el sitio de la lesión.
- Comezón o escozor intenso.
- Olor desagradable, producto de que las larvas se alimentan del tejido de la herida.
- Malestar en el lugar de la infestación.
- Brotes o marcas rojizas en la piel.
- Protuberancias en la región afectada.
- Heridas que supuran cerca del sitio de infestación.
- Sensación de parásitos que se mueven bajo la piel.
- En algunos casos, pueden verse huevecillos o larvas en la herida.
Si la infestación no se atiende a tiempo, pueden darse infecciones con bacterias que llevan a lesiones más serias, la pérdida de la función del órgano afectado y, en los casos más graves, la muerte.