Los regantes de Córdoba denuncian una subida del 45% en los cánones y tarifas de la Breña II y el Arenoso para 2025

La asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía ( Feragua ) ha llevado este jueves a la Junta de Explotación de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir en Córdoba su «indignación y sorpresa» por la propuesta de subida que se le ha planteado al regadío cordobés para los cánones y tarifas de los embalses Breña II y Arenoso de cara al año 2025. En el caso de Córdoba, más de 80.000 hectáreas se verán afectadas por este canon de regulación Breña II y Arenoso, con una repercusión superior a los 4,12 millones de euros. Además de exigir la rectificación de la propuesta para 2025 , Feragua ha insistido en la gestión directa de Breña II y Arenoso por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y en la ampliación a 50 años del periodo de amortización. Inciden en que a los regantes cada uno de estos dos embalses les está costando 26 euros/ha, mientras que la media del coste de los 18 embalses de la Regulación General es de 2 euros/ha. Según Feragua, la propuesta presentada por las sociedades y organismos dependientes del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico , pone sobre la mesa un nuevo incremento del 45% respecto al aprobado en 2024, que eleva a 51,5 euros por hectárea el canon de regulación de ambas presas, triplicando las tarifas de hace diez años (18,65 €/ha en 2014). Según los datos aportados por el colectivo de regantes, el coste por metro cúbico repercutido a los regantes del Guadalquivir en la propuesta del canon para 2025 se eleva a 0,59 euros/m3. «Lo disparato del precio se comprende bien si se compara por ejemplo con el coste que soportan los regantes del Levante español por el agua desalada que le suministra la sociedad pública estatal Acuamed, y que se sitúa entre los 0,35 y 0,45 euros. Los regantes consideran « indecente que una administración pública proponga pagar por el agua superficial convencional un precio superior al de un recurso hídrico que necesita pasar por un proceso tan costoso como la desalación». Ambos embalses van a costar a los regantes del sistema de regulación general del Guadalquivir 17 millones de euros anuales , «un montante exagerado sin ninguna correlación con el volumen de agua que están aportando ambos: en 2023 apenas llegó a los 29 hectómetros cúbicos», ha indicado Feragua. Los regantes han denunciado que «tampoco la estación de bombeo de la Breña II está rindiendo al nivel que se esperaba, pues los cálculos iniciales eran que elevaría 100 hm3/año, y apenas está elevando 20 hm3/año, a pesar de lo cual los regantes están soportando sus gastos de amortización y de explotación como si estuviera a pleno rendimiento». En este sentido, el secretario general de Feragua, Pedro Parias, ha afirmado que «sería razonable que la repercusión de los gastos de la Estación de Bombeo se acompasara a su entrada en servicio efectivo al 100%, pero no soportar el 100% de los costes cuando solo aporta el 20 % de los recursos planificados en el diseño». Las denuncias de los regantes pasan también por un «sobrecoste de tres millones de euros, debido a la repercusión del IVA, que se produce por la intermediación de Acuaes, lo que es un auténtico atraco tributario» . A todo esto se suma un plazo de amortización excepcional de 25 años «contrario a la Ley» y al periodo de amortización del resto de embalses de sus características, que es de 50 años (Breña II y Arenoso son los únicos en España cuyos cánones de regulación se amortizan a 25 años).