El castillo de Priego de Córdoba afronta la fase final de la restauración integral de sus murallas

La recuperación del castillo de Priego de Córdoba , constante en las últimas décadas, sigue con un nuevo paso. El Ayuntamiento acaba de conseguir casi 1,5 millones de euros del Programa de Mejora de la Competitividad y Dinamización del Patrimonio Histórico con Uso Turístico. Este proyecto, enmarcado en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y financiado por los fondos Next Generation de la Unión Europea, contempla importantes intervenciones destinadas a mejorar su conservación, accesibilidad y atractivo turístico. El arqueólogo municipal, Rafael Carmona , manifestó que el Gobierno local tiene ya redactados «una serie de proyectos, ya que llevamos trabajando en el castillo desde 1998 , con los primeros sondeos, dos años después de la adquisición por parte del Ayuntamiento». La convocatoria tenía como objeto a Bienes de Interés Cultural que tuvieran un uso turístico, como es el caso del Castillo de Priego, abierto desde hace mucho tiempo, y que en 2023 recibió 25.000 visitantes . «Cumplía los requisitos», afirmó el arqueólogo. Según indicó Rafael Carmona, la intervención de este proyecto consistiría principalmente en el «cierre del perímetro amurallado y de las actuaciones estructurales importantes». Eso quiere decir que «todas las murallas que se ven por dentro o por fuera, torres incluidas , ya se han intervenido en una primera fase que engloba casi todo a lo largo de años, con distintos periodos o fases». Ahora quedaría el sector noroeste del Castillo, el tramo que va desde Carnicerías Reales hasta la conocida como Torre Redonda en la calle Santiago. Con esta intervención quedaría cerrado el perímetro amurallado del castillo y Torre del Homenaje . Carmona añadió que, «en este sector se da una circunstancia diferente, y es que en el resto del castillo hay elementos monumentales». Son torres que, en ocasiones, como la del Homenaje, pueden llegar a los 30 metros de altura . «Están ahí desde siempre, aunque por momentos estuvieran mejor o peor conservadas», afirmó. La aportación del sector noroeste viene sobre todo por el interés de la excavación arqueológica. «Aquí había elementos que se han ido arruinando. Las murallas, que son interesantísimas y que pueden tener incluso varios metros de altura, estaban totalmente enterradas cuando empezamos los primeros sondeos en el año 1998, convirtiéndose en una especie de sector arqueológico que no tenía la misma monumentalidad», dijo, y eso no quiere decir que tenga menor importancia del resto. Hay una serie de muralla, una puerta de acceso, doble muralla, algunas torres y, sobre todo, «aquí están los lugares donde mejor están documentados los orígenes de la fortificación», precisó el arqueólogo. Casi todo lo que se ve actualmente, según Rafael Carmona, es bajomedieval cristiano pleno o bajomedieval , por lo tanto, es de entre los siglos XIII al XV. Pero ¿dónde está, por ejemplo, el castillo fundacional de época omeya, del que se sabe que existía a partir del siglo VIII y con total seguridad a partir del IX?. El arqueólogo añade que «ese castillo antiguo, fundacional, de época omeya , de la ciudad islámica, está localizado en este lugar donde queremos intervenir». Está, por ejemplo, la puerta, que tiene «un origen medieval del siglo X, y hay resto de murallas del siglo IX, además de todas las modificaciones que se llevaron a cabo entre los siglos XIII y XV». «Ahora mismo esto se concibe, y pensando sólo en el visitante, como un espacio en ruinas difícilmente comprensible, porque no se ha avanzado en esa comunicación social de los restos», dijo. El nuevo proyecto sí ayudará a llevarlo a cabo y lo hará cubriendo esos retos de forma que se conviertan en «una cripta arqueológica ». Los restos no se encuentran ahora mismo en muy bien estado, «porque son tapiales, estructuras de yeso y mamposterías que están muy castigadas por el paso del tiempo». La obra permitirá que en cuanto se queden protegidas de la intemperie, se podrán retirar elementos de protección provisionales y eso permitirá que el público pueda apreciarlos. Con la subvención del 2% cultural, que es independiente del proyecto actual, está pendiente la ejecución de otro proyecto compatible, como es la recuperación de los dos aljibes , con la idea de ponerlos en valor, rehabilitarlos y hacerlos visitables por su interés dentro de la fortificación.