Después de 4000 años, revelan cómo era el verdadero rostro de Tutankamón
Tutankamón es uno de los faraones egipcios más reconocidos de la historia antigua, ya que ascendió al trono con tan solo nueve años y existen diversas hipótesis sobre si la causa de su muerte fue un atentado o por causas naturales.
Se hizo famoso a nivel mundial en 1922, cuando encontraron su tumba casi intacta en el Valle de los Reyes en Egipto. Desde ese momento, se han realizado diversas investigaciones para descubrir cómo se veía realmente y un reciente estudio reveló que podría haber nacido con ciertas deformaciones en su cuerpo.
El verdadero rostro del faraón Tutankamón
Tutankamón Nebkheperuré fue un faraón del antiguo Egipto que ascendió al trono durante el periodo de la Dinastía XVIII entre los años 1332 a.C y el 1323 a.C.
Con tan solo nueve años, le tocó ascender al puesto tras la muerte de su predecesor el faraón Akenatón. Al momento del descubrimiento de su sarcófago, se encontraron diversos objetos como máscaras, joyas, estatuas y otros artefactos preciosos.
Los arqueólogos no logran coincidir en una versión sobre la causa de su muerte, ya que algunos afirman que murió por enfermedades genéticas, otros por asesinatos y otros por una lesión en la pierna que resultó mortal.
Fue enterrado con una máscara de oro como la tradición mandaba, lo que dio pie a diversos investigadores para teorizar sobre cómo era su cara. El objeto muestra un hombre con pómulos marcados, cejas arqueadas, labios gruesos y una mandíbula afilada.
¿Cómo era el verdadero rostro de Tutankamón?
A través de imágenes 3D, los arqueólogos lograron realizar una autopsia virtual del cuerpo del faraón, lo que ayudó a tener cierta idea de su cara en el plano real.
Fue realizado a través de una serie de tomografías, análisis genéticos y modelos digitales. Los primeros resultados indicaban que fue una persona atractiva para la época, pero que sufrió un accidente en un auto y un intento de asesinato que marcaron su rostro.
Sin embargo, las últimas investigaciones arrojaron que en realidad Tutankamón no era tan atractivo y que nació con rasgos deformes y lesiones en la cadera y pie.